La tijera aplicada a las partidas de prevención y extinción de incendios han dejado indefensos a los montes valencianos y es responsable en gran parte y por encima de las condiciones meteorológicas de la tragedia sufrida por los montes valencianos en la última semana, con más de 53.000 hectáreas quemadas y grandes pérdidas económicas agravadas por el fallecimiento en accidente de uno de los pilotos que participaban en la extinción.

La certeza de que «los incendios se apagan en invierno» no rige para el Gobierno de la Generalitat Valenciana aunque alguno de sus miembros la haya pronunciado como frase en ocasiones. La inversión en política forestal y espacios naturales del Consell recogida en las partidas presupuestarias 442.30 y 442.40 ha pasado de 142,4 millones de euros en 2008 a solo 19,9 en 2009. Incluso añadiendo a esta última cifra los 15,7 millones transferidos desde Infraestructuras y Medio Ambiente a Governació en el presupuesto de 2012, la reducción desde 2008 de la inversión de gestión forestal es de un 75%.

Si se suman los capítulos de prevención y extinción, la reducción reconocida —fruto de comparar las declaraciones del conseller Serafín Castellano en 2010 y en este año—es de unos 15 millones de euros. Decía el conseller que este año los medios disponibles eran «los mismos» que en 2011, cuando se quemaron 2.440 hectáreas. No mentía. Solo ocultaba que el «tajo» se produjo entre 2010 y 2011, cuando dejó de contratarse a 310 personas que formaban parte de las brigadas de refuerzo del verano. El recorte dejó fuera a 31 brigadas de verano—julio, agosto y septiembre— distribuidas por otros tantos municipios, justo en la época de mayor riesgo.

El efecto ha sido demoledor sobre las brigadas de Emergencias dedicadas al primer ataque al fuego, que han pasado de 74 a 43, aunque ahora todas disponen de una motobomba propia.

Juan Francisco Miralles, de la sección sindical de CCOO en Tragsa, la empresa que contrata las brigadas en nombre de la Generalitat, pidió ayer la dimisión del conseller. «Nos manifestamos en 2011 y repetimos a principio de año avisándole de lo que iba a ocurrir».

En UGT, Faustino Sánchez cree que con menos brigadas desplegadas en el territorio se tarda más en llegar a los incendios. Además, las libranzas hace solo la mitad de las brigadas esté operativa cada día.

Inversión insuficiente

Joan Francesc Peris, portavoz de Els Verds-PV, recuerda que la propuesta del Plan Acción Territorial Forestal (Patfor) elaborado por la Generalitat reconoce la «necesidad, matizada por sus criterios de austeridad», de invertir en los próximos 15 años una media anual de algo más de 27 millones de euros. En 2012 solo se prevé invertir 19,9 millones. Pero hay más: los 19,9 millones representan una reducción del 38% respecto a 2010, «muy por encima del recorte medio en los presupuestos que es del 6,4%. Nadie puede decir con estos datos que la política forestal sea una prioridad para el gobierno de Alberto Fabra», añade Peris.

Lo dice la propia Generalitat a través del Patfor: los expertos estiman que una adecuada gestión forestal que mantenga los valores ambientales del bosque mediterráneo requeriría unos 100 euros por hectárea y año o lo que es lo mismo:121,7 millones de euros al año. En 2012 no se llegará ni siquiera al 15% de la inversión necesaria.

Els Verds creen que en el momento actual de crisis económica y paro junto a la evidencia del cambio climático deberían hacer prioritaria la política forestal.