La Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana culpó ayer al capitán del barco "Nairobi" de la muerte por malaria de uno de sus tripulantes y garantizó que la autoridad portuaria de Castelló actuó en todo momento siguiendo el reglamento sanitario internacional establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, afirmó que el buque, que había pasado por Lagos, Togo y Las Palmas, "no cumplió los protocolos establecidos de avisar a Sanidad Exterior y a Capitanía Marítima de que viajaban pasajeros afectados con malaria".

El "Nairobi", un barco de bandera maltesa con una treintena de marineros a bordo, fue sometido ayer a un exhaustivo protocolo sanitario para descartar nuevos casos de contagio. Toda la tripulación fue chequeada por personal médico y el armador acreditó que tiene en regla los certificados de desratización y desinsectación desde el 1 de abril al 1 de octubre. Después de estas comprobaciones, sobre las 12.55, el barco partió de nuevo hacia el puerto italiano de La Spezia, cerca de Livorno. "Es al capitán a quien compete comunicar que lleva un enfermo a bordo. Si no lo hace difícilmente nuestro servicio de Sanidad Exterior puede hacer nada", aseguran fuentes de la Delegación del Gobierno.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad ha abierto una investigación para depurar responsabilidades por la muerte del marinero ucraniano, nacido en 1985.

Trámites

Mientras tanto, el cuerpo del fallecido permanecía ayer en el Instituto de Medicina Legal, donde la autopsia confirmó la muerte por malaria. La familia del marinero, a la que ya se ha comunicado el fallecimiento, podrá recoger el cadáver una vez que el juzgado lo autorice.

A su vez, el segundo oficial del buque, también contagiado por la malaria, se recuperaba en el Hospital General de Castelló. Según fuentes de este centro sanitario, el enfermo se encuentra "fuera de peligro" y permanecerá unos días más en observación. Representantes legales del buque lo acompañaron en el día de ayer aseguraron que el tripulante no quiere hacer declaraciones sobre lo sucedido. El caso del marinero ucraniano muerto a bordo del Nairobi, buque perteneciente a la empresa MSC, disparó el jueves todos los protocolos sanitarios en PortCastelló tras confirmar los médicos del 112 y las autoridades portuarias que podría tratarse de un contagio por malaria.