Los aviones no llegarán al aeropuerto de Castelló pero la terminal vuela de periódico en periódico por todo el mundo. Esta vez ha sido el "The New York Times" el que se ha hecho eco del fracaso económico del principal proyecto de Carlos Fabra. El rotativo norteamericano titula en una reciente edición: "En España, un símbolo de la ruina en un aeropuerto a ninguna parte". Y añade: "Un avión ha llegado al aeropuerto fantasma de Castelló, en el sureste de España", refiriéndose a la escultura de Ripollés, el único aparato alado de las instalaciones.

"En lugar de aterrizar en la pista, el avión,de aluminio, se colocó esta semana en la cima de una estatua gigante", asegura con ironía el diario neoyorquino. Para el periódico, se trata de "otra vuelta de tuerca" en la historia de un proyecto de 183 millones de dólares "símbolo del despilfarro y el gasto que ha hundido a España en la recesión y crisis bancaria". El reportaje recoge que la estatua de Ripollés mide 79 metros y ha costado 375.000 dólares, supuestamente "en honor a Carlos Fabra, cabeza de gobierno de la provincia de Castelló durante muchos años y fuerza impulsora del aeropuerto".

"El señor Fabra -sigue el reportaje- es investigado por varios casos de corrupción y evasión de impuestos. No ha sido acusado, sin embargo, y no se espera que aparezca en los tribunales antes de que finalice el año". El "The New York Times" recuerda que Fabra mantiene la presidencia de la empresa que administra el aeropuerto, al que califica como el colofón de "una década de auge de la vivienda, donde España construyó aeropuertos, autopistas y ferrocarriles bajo la presión de los políticos". Incluso cita el "que les jodan" de la hija del expresidente, Andrea Fabra, en el Congreso.