El conseller de Economía, Máximo Buch, aseguró ayer que los ajustes adoptados este año para reducir el déficit tendrán "efectos relevantes" en 2013 y por eso no cree que sean necesarias nuevas medidas para alcanzar el objetivo de déficit del 0,7 % el próximo año. Buch manifestó que este año se han aprobado "muchos ajustes" pero la mayoría no tendrá efectos destacados hasta el próximo año, como la reestructuración del sector público empresarial que producirá ahorros en el último trimestre pero el impacto se verá durante todo 2013.

"Todas las medidas que se toman durante este año tendrán un efecto multiplicador", dijo el conseller tras cifrar en 400 millones de euros el impacto de reducir el déficit al 0,7 % en el próximo ejercicio. Buch consideró que esa reducción es "mucha" y requerirá un esfuerzo "muy importante" y "eficiencia", aunque afirmó que la evolución económica va en sentido positivo y están teniendo efecto los planes de ahorros. Además, avanzó que el déficit del primer semestre del año va a experimentar "una mejora notable", pero no ha concretado más, ya que la cifra la dará a conocer el conseller de Hacienda, José Manuel Vela, a finales de este mes. El conseller ha apostado por desarrollar planes de estímulo para generar más ingresos procedentes del aumento del empleo, y conseguir de esta manera cuadrar el presupuesto vía ingresos.

"Todo el mundo, igual o peor"

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, reivindicó que ha llegado el momento de que los valencianos defiendan su posición respecto a la crisis económica que sufre España y no se "coman" la teoría de que son "los peores del mundo mundial, cuando todo el mundo está igual o peor". La alcaldesa aseguró que el pasado viernes mantuvo una reunión en el Ministerio de Hacienda con el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta. "En el Ministerio nadie dijo nada de rescate cuando algunos medios estaban dando que esta Comunitat estaba hecha unos zorros", se lamentó. A juicio de Barberá, "cuando lo pida Cataluña, Andalucía o Murcia no serán rescates o intervenciones" sino que serán consideradas "adhesiones a fondos de mayor liquidez", y pidió "igual trato" para todas las comunidades.

Por su parte, el portavoz del PSPV, Antonio Torres, pidió ayer al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que comparezca públicamente para explicar "a todos los valencianos qué está pasando con nuestras cuentas".

También le pidió que dé participación al resto de grupos políticos en la elaboración de un plan de reajuste que "sirva de verdad para superar los 17 años de mala gestión del PP y que no suponga que esta crisis la pague únicamente un grupo de valencianos, sin que afecte a los que más tienen".

El síndic del PSPV advirtió que "por respeto a los valencianos" el presidente debe comparecer, "hablar con las fuerzas políticas, sindicales, empresarios, con todo el mundo y escuchar las propuestas y sugerencias para poner en marcha un plan que realmente sirva a nuestra comunidad para salir del hoyo en que nos encontramos".

Comparecerá Vela y no Fabra

Torres mostró la "predisposición" de los socialistas a "ayudar al Consell a salir de la crisis, siempre y cuando se expongan con claridad las cuentas de esta Comunitat y siempre que haya una regeneración democrática porque la imagen de nuestra Comunitat está muy debilitada porque hay muchos políticos sospechosos de corrupción en las Corts". Finalmente, será Vela y no el presidente el que comparezca en la Diputación Permanente de las Corts, con toda probabilidad el jueves de la próxima semana.