El empresario preso por el fraude de las ONG no era una desconocido en la Generalitat Valenciana. Antes de percibir a través de la red de organizaciones que montó más de seis millones de euros en subvenciones para el Tercer Mundo, Augusto César Tauroni ya se había hecho con más de 9,7 millones de euros en contratos de la administración autonómica. La mayoría en servicios informáticos y teléfonos de asistencia de la Conselleria de Bienestar Social cuya puerta le abrió de par en par el portavoz del PP Rafael Blasco, quien en las actualidad está acusado por el fiscal de media docena de delitos relacionados con el entramado que supuestamente montó Tauroni a la sombra de la extinta Conselleria de Solidaridad.

Como ya contó Levante-EMV en su día, el contrato más preciado que consiguió Tauroni fue el de la gestión de los centros mujer 24 horas en 2002 por el que consiguió 6,7 millones de euros. En esta adjudicación, su firma Lonerson participó en Unión Temporal de Empresas con la sociedad Tissat. No fue la única empresa con la que participó Lonerson en algunos de estos contratos. Con la firma Asispa obtuvo entre 2001 y 2004 (adjudicación hecha en 2002) dos teleasistencias en Bienestar Social por más de 700.000 euros. Cabe recordar que Blasco dirigió Bienestar Social entre 2000 y 2003, tras antes haber pasado por la Conselleria de Empleo.

Lonerson, que compartía oficinas y empleados con GCS (firma de cabecera del empresario preso), obtuvo también contratos en solitario como fue una teleasistencia en Bienestar Social entre 2006 y 2008 por 726.693 euros. Gracias a una denuncia del exgerente de esta empresa, la juez que instruye la causa de las ONG ha podido conocer su funcionamiento y empezar sus pesquisas por si en este caso se hubiera repetido el funcionamiento de la Fundación Hemisferio, la matriz de la trama.

Con GCS, una firma que sí utilizó en la red de ONG, Tauroni también obtuvo gran cantidad de contratos de Bienestar Social con Blasco de conseller. El primero fue un servicio informático en 2001 por 123.207 euros y el teléfono del mayor el mismo año por 99.716 en una adjudicación hecha con urgencia. En 2002 le siguieron los centros Infodona por 284.454 euros y en 2003 un servicio de mantenimiento de Software por el que cobró 382.000 euros. Para dos años (2002-2004) repitió con la teleasistencia del teléfono del menor y del mayor. Este mismo servicio fue renovado desde 2007 a 2009, en este caso el portavoz del PP ya no estaba en Bienestar Social aunque la firma ya se había convertido en un contratista habitual ya que en 2009 volvió a repetir la adjudicación, esta vez por 401.350,54 euros.

Esta empresa tiene contratos también con el Hospital General de Valencia, cuyo gerente es el sobrino del portavoz del PP, Sergio Blasco. En este caso, el contrato que trascendió fue el mantenimiento informático por 216.364 euros en el año 2000. El empresario preso también obtuvo contratos en la Conselleria de Industria.

Cabe recordar que GCS fue utilizada por Tauroni, como reveló ayer este periódico, para venderse así mismo su yate y así lavar 235.000 euros defraudados en la trama de ONG mediante una empresa radicada en EE UU.

El portavoz del grupo parlamentario socialista en las Corts, Antonio Torres, señaló ayer que si el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, no adopta medidas contra Blasco, significa que «pase lo que pase en la Comunitat él nunca va a actuar». El diputado socialista indicó que «se ha demostrado que se ha robado a los más pobres, a los que no tienen ni para comer para que una pandilla de sinvergüenzas se compren pisos o apartamentos de lujo o embarcaciones en Miami».

En la misma línea se manifestó el diputado de EU Lluís Torró, quien señaló a Blasco como «principal responsable» del fraude en las ayudas de Cooperación.