La crisis ha causado un efecto de retorno a las aulas, ya que cada vez son más los ciudadanos sin ocupación en la actualidad que optan por formarse para intentar superar las dificultades que presenta un mercado laboral saturado y en claro retroceso. Las oportunidades son mínimas y lo mejor es contar con el currículum más amplio posible.

Según los datos aportados por el Eurostat, tres de cada diez valencianos en activo durante 2011 (29,5%) cuentan con estudios terciarios. La cifra es ligeramente superior a la misma tasa del 2010 (28%) y supera en tres décimas a la del 2008, ejercicio de comienzo de la crisis (26,4%).

Así, en un contexto donde el paro ha crecido de forma galopante en cuatro años, las empresas apuestan por contratar a gente más preparada ante la gran diversidad de candidatos. De ahí el aumento de valencianos en activo con titulación universitaria, pese a haber más desempleados.

De este modo lo explica Marc Candela, portavoz del sindicato educativo STE-PV: «Que suban los porcentajes siempre es positivo, aunque el problema es saber si estos titulados realizan tareas profesionales acordes a su preparación académica. Hay mucha gente que trabaja en lo que puede».

La dinámica también fue valorada por Ferran García (CC. OO), que citó a las explotaciones agrarias y las plantas industriales como dos de los grandes caldos de cultivo de esta situación: «hablamos de escenarios laborales donde un ingeniero puede hacer el trabajo de un licenciado a pesar de contar con un título superior al del puesto, ya que las empresas aprovechan la coyuntura».

Ambos representantes coincidieron a la hora de señalar los recortes aprobados por el Gobierno y la Generalitat en materia de educación como claros frenos al crecimiento para 2012: «a finales de septiembre veremos como el número de matrículas universitarias desciende por el aumento del precio de las tasas, mucha gente no podrá costearse sus estudios por falta de recursos y se quedará a mitad del camino».

«Mucho camino por recorrer»

Aunque los registros valencianos siguen en aumento, los índices siguen por debajo de la media nacional, que en 2011 se situó en un 31,6% de españoles en activo con estudios universitarios. Marc Candela añadió que «las tasas son positivas, pero queda mucho camino por recorrer. Lo que está pasando no debería tener la crisis como su principal causa, pero desgraciadamente es así. La gran mayoría de problemas que arrastramos —y que arrastremos— tienen al sistema productivo desarrollado por el Consell durante los últimos años como origen : se han cargado a la industria y han apostado de forma clara por el turismo y la construcción».

El portavoz sindical recordó que «en los años de bonanza los niños decían al profesor que no querían estudiar porque yendo a la construcción cobrarían más que el docente. Ahora recogemos los frutos de entonces».

Aunque el informe del Eurostat —que abarca a los ciudadanos con empleo con edades entre los 25 y los 64 años— no se queda ahí. Los datos del organismo europeo avalan una paulatina disminución del porcentaje de valencianos en activo con título de la ESO (47,9 en 2011). Los trabajadores con el nivel más básico de educación superior siguen siendo los más numerosos, aunque registran una merma de tres décimas respecto al 2008, consecuencia directa de las dinámicas sufridas por el resto de colectivos.

Por último, el grupo de trabajadores con bachiller alcanzó un registro del 22% durante el año pasado, siendo ligeramente inferior al dato del 2008 (23%).