La coalición valenciana Compromís, que en España concurrió a las Elecciones Generales con los ecologistas de Equo, empieza a ser visible en el panorama estatal, según el barómetro de julio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Este éxito, que puede multiplicar su crecimiento a nivel autonómico, contrasta con el poco conocimiento y valoración que tiene su diputado en Madrid, el exalcalde de Sueca Joan Baldoví. Así, Baldoví es el líder menos valorado de las Cortes Generales con un 3,3 % y un 86,6 de los encuestados asegura no conocerlo, según el CIS.

Estes desconocimiento ha intentado ser contrarrestado con una política efectista que sí que sirvió a Compromís para romper la barrera del 5 % y convertirse en la tercera fuerza política en la Comunitat Valenciana, por encima incluso de EUPV. Ni su llegada al congreso en bicicleta, ni la entrega a Rajoy de la factura de una deuda impagada del PP a Feria Valencia, ni tampoco las camisetas reivindicativas han conseguido romper ese techo de cristal que sí que han superado otros diputados como la parlamentaria de Geroa Bai, Uxue Barkos, que, según el CIS, tiene un 12,2 % de valoración y a quien conocen más de dos de cada 10 españoles pese a presentarse sólo por Navarra. Eso sí, Barkos lleva varias legislaturas en Madrid y es una habitual de los medios de comunicación estatales.

Pese al desconocimiento del trabajo de Baldoví, el diputado lleva nueve meses en el Congreso, la nota de valoración que le ponen los que le conocen supera a varios de los líderes de los partidos minoritarios. Baldoví consigue un 3,23 sobre 10, por encima de Iñaki Antigüedad de Amaiur o de Josu Erkoreka del PNV. Respecto a Rajoy, el exalcalde de Sueca se queda a una décima del presidente de Gobierno. Ningún líder llega al 5.

Estas discretas valoraciones del diputado contrastan con la repercusión que está alcanzando la marca Compromís-Equo. Según el barómetro de julio, la coalición tiene un 0,8 % de intención de voto, unos números que extrapolados a unas elecciones multiplicarían los votos de noviembre de 2011.

La coalición tiene la misma intención de voto que un partido con tan buenos resultados como Amaiur o con el ya consolidado en Madrid ERC. El handicap es que el voto de Compromís estaría concentrado en las provincias de la C. Valenciana y se diluiría en el resto del Estado, ya que el voto de Equo es muy disperso y sería difícil que sumara diputados.