Las comisarías se saturan de niños que precisan el DNI para ayudas escolares

Fuentes de la Conselleria de Educación explicaron que, este año, el bonolibro dejará de existir como tal para dar paso a una ayuda nominativa que irá en función de la renta de cada familia. De esta forma no todos los alumnos matriculados en educación primaria en un centro público o concertado cobrarán las ayudas ya que sólo las recibirán quienes más lo necesiten. Para ingresar el dinero que corresponda a cada alumno «la conselleria necesita que el menor tenga una cuenta a su nombre en un banco» ya que «así lo especifica la Ley de Subvenciones». Este es el mismo sistema que funciona para los beneficiarios de las ayudas en educación secundaria obligatoria (ESO).

Sin embargo, algo que en teoría parece sencillo ha aumentado las colas en las comisarías del Cuerpo Nacional de Policía que realizan este trámite ya que a las esperas habituales de la época estival se ha sumado la presencia de menores para que los agentes les tomen la huella dactilar y le expidan el documento con el que conseguir las ayudas para material escolar, transporte o comedor.

Desde la Conselleria de Educación aseguraron que las ayudas para el curso escolar 2012-2013 y sus requisitos se comunicaron a los centros educativos «unos dos meses antes de que finalizara el curso». Sin embargo, la orden se publicó casi una semana después de que los alumnos concluyeran las clases, con lo que el requisito de disponer de un DNI para conseguir una libreta bancaria a nombre del menor ha pillado por sorpresa a centenares de familias.

Por ello, y ante las quejas de diversos colectivos educativos, la Conselleria de Educación decidió ampliar el plazo para presentar las solicitudes hasta el inicio del nuevo curso ya que «es posible que, al estar de vacaciones, algunas familias no se hayan enterado y se queden fuera de la ayuda por desconocimiento, a pesar de los diversos anuncios realizados por la conselleria».

Las rentas más bajas, 125 euros

Las ayudas para la adquisición de libros de texto y material didáctico e informático para todo el alumnado (primaria, ESO, educación especial y centros de acción educativa singular) ascienden a 31 millones de euros. Al conceder las subvenciones en función de la renta, por primera vez, las ayudas individuales para la adquisición de libros se incrementarán un 19 % respecto al curso anterior ya que los estudiantes que menos renta familiar tengan (menos de 5.591 euros) pasarán de cobrar los 105 euros que el año pasado recibió cada alumno de Primaria, a los 125 euros que les corresponderán este año. En el siguiente tramo se encuentran las familias con una renta que oscile entre los 5.591 euros y los 7.455 euros, que percibirán una ayuda de 87,5 euros. Si la renta supera los 7.455 euros por cada miembro de la unidad familiar la subvención será de 50 euros. El resto se quedará sin ayudas.

Los bebés aún no nacidos cuentan por primera vez como unidad familiar

La Conselleria de Educación ha incluido como novedad añadir a los hijos concebidos y no nacidos como miembros de la unidad familiar, de acuerdo con la Ley de Protección de la Maternidad. De esta forma, los tramos establecidos por la Generalitat Valenciana como umbrales de renta para poder solicitar las ayudas varían.

Incluyendo a los bebés aún no nacidos, los baremos que regirán la concesión de ayudas y su cuantía son los siguientes: una familia de dos miembros, 24.089 euros como máximo, una familia de tres miembros, 32.697 euros; una familia de cuatro personas, 38.831 euros; una familia de cinco integrantes, 43.402 euros; una familia de seis miembros, 46.853; una familia de siete personas, 50.267 euros y una familia de ocho miembros, 53.665 euros como máximo. A partir del octavo miembro se añadirán 3.391 euros a la renta de la unidad familiar por cada nuevo miembro.

Ahora bien, la conselleria ha decidido que no se tendrá en cuenta el criterio de la renta para los alumnos de los centros de Educación Especial, por lo que 13.000 alumnos recibirán la ayuda directamente.