Si la Generalitat valenciana tenía puestas sus esperanzas para superar la crisis en una mejora de la financiación autonómica ya puede ir buscando alternativas. El Gobierno de España ha metido en el congelador la idea de volver a revisar el modelo al menos hasta finales de 2015, momento en el que un comité técnico estudiará la fórmula aplicada estos años e informará "sobre posibles modificaciones".

Así se explica el Ejecutivo en una respuesta por escrito enviada al senador socialista Francisco Fuentes Curbelo, quien se interesó por este asunto tras la reunión entre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero. A juicio del senador, de las informaciones de aquella reunión se deduce que en 2013 se podría abordar la reforma del sistema, pero el gobierno lo sitúa dos años más tarde, a finales de 2015.

Será entonces cuando el Comité Técnico constituido para ese seguimiento del sistema estudie qué resultados ha dado la fórmula que se ha venido aplicando y haga si considera oportuno nuevas propuestas al Consejo de Política Fiscal y Financiera, que es el órgano en el que se decide esta materia.

La decisión es un auténtico varapalo para el Consell del PP aunque, a decir verdad, ni el Gobierno había dado muchas razones para la esperanza ni la reivindicación del Consell, una vez salido Zapatero de la Moncloa, había sido muy consistente.

La mejora de la financiación es una reivindicación histórica del PP pero nunca ha ido más allá del pantano de Contreras, ni siquiera con los populares en la oposición al Gobierno. Primero se pedía un cambio del sistema aprobado durante el mandato de Aznar para que se reconociera el incremento poblacional; después de eso, una vez reformado el sistema por Zapatero en 2009, la exigencia es que los valencianos gocen de la misma financiación por habitante que la media. De un modo u otro, la Comunitat Valenciana sigue en el furgón de cola como una de las peor financiadas. En 2009, dejó de ingresar 1.018 millones.

Sobre esta base, en mayo pasado todos los partidos en las Corts acordaron instar al Consell a que inicie las gestiones "inmediatas y oportunas" ante el Gobierno de España para que realice los cambios legislativos necesarios para "corregir el desequilibrio que el sistema de financiación vigente ha ocasionado a la Generalitat".

Quien hizo suya la iniciativa fue el secretario general del PSPV y diputado nacional Ximo Puig, que llevó al Congreso una propuesta para mejorar la financiación valenciana que el PP y UPyD tumbaron. De un modo u otro, la decisión del Gobierno de aplazar tres años y medio cualquier revisión del modelo vigente da argumentos a la oposición en sus críticas al Consell por su moderación ante Madrid.