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En los últimos cuatro años, los recortes que están sufriendo la mayoría de las comunidades autónomas en subvenciones para proyectos de cooperación y educación para el desarrollo se han incrementado. En la Comunitat Valenciana las ayudas han menguado un 65% (cifra superada por Castilla La Mancha, con el 100%, y Canarias, con el 89%), según la Coordinadora de ONG para el Desarrollo (Congde). El colectivo argumenta que no sólo son recortes desproporcionados, sino que además, orientan los escasos recursos que quedan hacia modelos de cooperación que excluyen a las ONGD en favor de otros actores.
Estas decisiones dejan en suspense actuaciones que se realizan desde la década de los 90, con una valoración positiva a nivel internacional y que han llegado a convertirse en una seña de identidad de la cooperación española. Ante este giro forzado por la mala situación económica, la coordinadora defiende la función de las ONGD como el único agente de la sociedad civil cuya misión fundacional, objetivo expreso y fin último y exclusivo es la lucha contra la pobreza y la injusticia. Además, resaltan su demostrada capacidad para el trabajo en contextos inestables, al servicio de las personas más vulnerables. Desde la coordinadora aseguran que un modelo de cooperación que incorpore a las ONGD supone que las políticas se centren en la lucha contra la pobreza y las desigualdades sociales.
