El vicepresidente y portavoz del Consell, José Císcar, aseguró ayer que el Ejecutivo "es partidario" de "allí donde se pueda" repartir el sacrificio y no despedir plantilla en la Generalitat, al tiempo que aseguró que el Ejecutivo de Alberto Fabra no contempla nuevos ajustes en el colectivo de funcionarios interinos tras los recortes aprobados en el decreto de medidas urgentes para reducir el déficit público del pasado mes de enero. El citado decreto incluye una cláusula que habilita a la Generalitat a reducir efectivos temporales hasta un 25%. El Consell negó ayer que tenga previsto activar esta disposición que abre la vía a despidos masivos. La opción de adelgazar plantilla se ha valorado en varias ocasiones, aunque, al menos hasta el momento, se mantiene congelada.

"Dijimos entonces y mantenemos ahora que, allí donde se pudiera, nosotros somos partidarios de repartir el sacrificio y no despedir plantilla", indicó Císcar en un comunicado público. El intento de Císcar para tratar de tranquilizar al colectivo de funcionarios interinos no convenció ni a la oposición ni a los sindicatos mayoritarios CC OO y la FSP-UGT, para quienes la espada de Damocles está encima de miles de temporales desde que el Consell se habilitó legalmente para, llegado el momento, poder prescindir de parte de este colectivo. "Ahora es cuando tenemos la certeza de que van a hacerlo porque cada vez que hablan, luego hacen lo contrario", denunció Gonzalo Fernández (FSP-UGT).

El responsable de autonómicas del sindicato recordó que Císcar y el conseller de Hacienda, José Manuel Vela, prometieron no bajar el sueldo a los funcionarios y, además del recorte de enero, "van a quitarnos" la paga extraordinaria de Navidad. "Vela se comprometió a compensar los acuerdos de Madrid. Andalucía lo ha hecho y aquí ni se lo plantean". "Son unos embusteros; no nos creemos nada", manifestó Fernández, quien se preguntó por qué, si la plantilla no va a variar, el Consell lleva más de dos años sin publicar la relación de puestos de trabajo. Desde la FSP-UGT se mostraron convencidos de que Fabra seguirá los pasos de su homóloga en Castilla-La Mancha, Maria Dolores de Cospedal, y aprobará planes de ajuste de plantilla.

Por su parte, CC OO emplazó al Consell a que "de manera inmediata" derogue la disposición del decreto de enero, según la cual, "el Consell, en el ámbito de sus competencias, podrá aprobar Planes de Ordenación de Personal con la finalidad de ordenar la Administración de la Generalitat, para la reducción de hasta un 25% de los efectivos de carácter temporal, para alcanzar los objetivos establecidos en materia de reducción del gasto público, así como para lograr una mayor racionalidad y eficacia en la Administración de la Generalitat".

En un comunicado, CC OO, que cifró los posibles despidos en más de diez mil personas, aseguró que con independencia de las críticas se "opondrán de forma beligerante" ante cualquier decisión que suponga mandar al paro a empleados públicos, sean de la condición que sean, y reducir la calidad de los servicios públicos.

Desde el PSPV también se instó al Gobierno de Fabra a pasar de las palabras a los hechos y se emplazó al Consell a derogar la cláusula de los despidos. El diputado socialista Rafael Rubio avanzó que su grupo presentará una propuesta de resolución en el debate de política general, previsto para la última semana de septiembre, para instar al Consell a retirar la disposición. Rubio indicó que si Císcar está tan seguro de sus palabras "no tendrá ningún problema en votar" esta resolución.

Agradecimiento a los funcionarios

Por otro lado, en un acto en Alicante Císcar subrayó que "esfuerzos" que están haciendo los ciudadanos "no van a ser en balde", ya que, "permitirán salir lo antes posible" de la crisis. El vicepresidente también envió un mensaje de agradecimiento a los funcionarios por los sacrificios que se les está pidiendo.