Más de la mitad de los reclusos del centro penitenciario de Picassent son reincidentes, según revela una informe del sindicato Acaip sobre la población reclusa en la Comunitat Valenciana. La investigación, realizada a partir de datos oficiales de Instituciones Penitenciarias con fecha de 1 de julio, precisa que el 51 % de los internos recluidos en Picassent, Albocàsser y Villena están entre rejas por haber cometido varios delitos. El informe advierte de que los centros penitenciarios valencianos encierran al 23 % de las reclusas más peligrosas del Estado. Además, como ayer informó Levante-EMV, la población extranjera en las prisiones valencianas se ha multiplicado por cinco en la última década.

El análisis de Acaip precisa que en los siete centros penitenciarios de la Comunitat Valenciana hay 7.570 reclusos (6.985 hombres y 585 mujeres). El 78,71 % de los presos (6.161) cumple condenas, el 16,03 % (1.081) está a la espera de juicio y el 5,25 % (328) tiene un internamiento judicial que le restringe su libertad.

El estudio revela que la prisión de Picassent tenía el 1 de julio de 2012 una población reclusa de 2.424 internos. El informe anual de la Defensora del Pueblo alerta de que Picassent es una de las seis prisiones españolas más saturadas. La institución considera preocupante la reducción de plantillas de funcionarios por el recorte de gasto. La Defensora del Pueblo incide en su informe en que la dotación de plantillas es imprescindible para garantizar la seguridad en la prisión y los derechos fundamentales de los internos.

El Gobierno confiaba en reducir la saturación de la cárcel de Picassent con la apertura de Siete Aguas. Sin embargo, el Ministerio del Interior ha paralizado el proyecto por falta de presupuesto y la imposibilidad de hacer frente a los compromisos y al calendario de pagos establecido en el contrato.

Reclusos conflictivos

El sindicato Acaip también expresó ayer su temor por el incremento de reclusos "conflictivos". Según la formación sindical, el 23,61 % a nivel nacional de las reclusas clasificadas como "muy peligrosas" se encuentra en las prisiones de la Comunitat Valenciana. En total son 185 presas. El centro penitenciario de Picassent encierra a 102, el 15,28 % del total de presas muy peligrosas a nivel nacional.

El informe revela que se está produciendo un envejecimiento de la población reclusa penada. El porcentaje más importante se sigue manteniendo en la franja de edad de entre 31 y 40 años, pero se ha incrementado de forma muy significativa el grupo de entre los 41 y 60 años. El 30,34 % de los acusados son menores de treinta años, grupo que en 2011 alcanzaba el 48 %.

El estudio precisa que la mayoría de los condenados cumple una condena inferior a los ocho años. Los internos en tercer grado son 769 y representan el 13,69 % de los condenados. Estos presos están en régimen de semilibertad y, en teoría, la mayoría solo debería ir a prisión a dormir. Sin embargo, debido a la crisis económica y a las dificultades para encontrar trabajo, cada vez son más los internos que permanecen durante todo el día en los centros penitenciarios, aunque las cárceles no están preparadas para ello. El 72,35 % de los internos están clasificados en segundo grado. El grupo más minoritario es el de los internos de primer grado, que suma el 3 % del total. Son 121 presos y, según Acaip, muchos de ellos han protagonizado graves incidentes en prisión.