La Junta Central de Usuarios del Júcar-Vinalopó ha cerrado ya un acuerdo con la Confederación del Júcar y la Generalitat para que Alicante reciba a partir de 2014 -una vez esté resuelto el problema de las filtraciones en el embalse San Diego- un segundo trasvase de 12 hm3 para el regadío de todos los cultivos. Los regantes han dado un voto de confianza a la sociedad estatal Acuamed tras recibir el último análisis que garantiza la calidad del agua que desde el jueves llega ya a 20.000 agricultores. En este sentido, Andrés Martínez, presidente de la Junta, explicó ayer que "el caudal sólo se ha utilizado para las 15.000 hectáreas de uva de mesa porque era lo más urgente y porque sus productores sí pueden pagar los 0,19 euros/m3 que cuesta".

El trasvase ha solucionado un problema grave en el Medio Vinalopó, pero también ha provocado la ruptura de la unidad entre los agentes que trabajaron por el desarrollo del proyecto, que han estado durante siete años rechazando el trasvase y cuestionando la calidad del agua. El Instituto de Geografía de la Universidad de Alicante rechaza el acuerdo entre los regantes y la Administración al advertir de que la aparición de pesticidas y plaguicidas que llegan al Júcar no se puede corregir, según aseguró el catedrático de Geografía Antonio Rico, colaborador de la Junta. Lacónico, pero contundente, se mostró el director del Instituto, Antonio Gil Olcina: "Qué culminación tan desdichada".

Discusión

Andrés Martínez señaló por su parte: "Es cierto que el agua que repartimos llegó desde el Azud de la Marquesa con coliformes y fitosanitarios, pero en los dos años que ha estado embalsada, la calidad ha mejorado sustancialmente y se puede usar para regar. Sólo tiene un problema de exceso de sal, unos 1.400 microsiemens, cuando lo ideal es que el caudal esté por debajo de mil, pero es apta para el riego y así lo garantiza el último análisis. No tiene nada que ver que un agua no sea apta para el consumo, conque sea buena para regar".

Contra el Gobierno y el PP

Por su parte, el geógrafo Antonio Rico se mostró rotundo: "La discusión no es si este agua que ahora recibe el Vinalopó sirve o no para regar. La cuestión es que la Junta Central no tenía que haber aceptado iniciar el trasvase sin tener confirmación por escrito, y previa auditoria técnica, de que el ministerio se comprometía a hacer la toma de Cortes de Pallás". Rico mostró su desconfianza con respecto a que lo acordado tenga marcha atrás: "Mucho me temo que no se va hacer y ahí va a tener mucha responsabilidad el partido en el Gobierno, que fue el mismo que inició el trasvase desde Cortes. Ha tenido una actuación lamentable y desleal con la provincia de Alicante".