Podría decirse que la empresa pública Vaersa (Valenciana Aprovechamiento Energético de Residuos) se ha visto afectada por una paradoja: el Consell ejecutará en las próximas semanas un ERE de 350 despidos después de haberla alimentado durante años utilizando irregularmente a sus trabajadores para hacer tareas que correspondía a funcionarios de la Conselleria de Medio Ambiente.

Así se desprende del informe de 2011 de la «policía económica» de la Conselleria de Hacienda, al que tuvo acceso este diario. El documento de fiscalización constata que la empresa pública contrata a dedo y nutre el 79 % de la plantilla de cuatro direcciones generales de Medio Ambiente. Y todo ello generando un sobrecoste de 3, 8 millones.

Fue en julio de este año, apenas unos días antes de anunciar el ERE, cuando la Conselleria de Medio Ambiente decidió poner fin a este «despilfarro». Tanto la Dirección General de Medio Natural como la de Calidad Ambiental recortaron las encomiendas para el segundo semestre de este año. Sólo la dirección de Medio Natural retiró 1, 87 millones para encargos de trabajos en reservas naturales, trabajos forestales, etc. Ahora, según fuentes próximas a la conselleria, están en el punto de mira unos 94 empleados de parques naturales de la provincia de Valencia.

Ante esta situación, el diputado de Medio Ambiente del PSPV, Francesc Signes, exigió ayer un «compromiso concreto y detallado» de la conselleria de que «las actuaciones que hasta ahora acometía Vaersa en cuanto a protección de espacios naturales y forestales no van a dejar de ejecutarse».

Y, respecto a las irregularidades reveladas por la «policía económica» de Hacienda, Signes señala: «En el caso de que todas las actuaciones vayan a ejecutarse por el personal de la conselleria, Bonig debería explicar de forma inmediata por qué si tiene capacidad para realizar estos trabajos hasta ahora han sido encargados fuera de la conselleria con el despilfarro que ha conllevado».