A José Bustos se le conocía en Pedralba como «El Medallero», apodo que le venía de cuando llegó a este municipio de Los Serranos tras la Guerra Civil y presumía de la condecoración que le habían entregado por su actuación dentro de las filas nacionales. «Mi abuelo era andaluz y muy pobre. Pero muy de derechas», explicaba ayer Marisa, una de sus nietas y prima de Manuel Bustos Garrido, el alcalde socialista de Sabadell que el martes fue imputado en una operación contra una supuesta trama de corrupción urbanística y cobro de comisiones. También está imputado otro Bustos nacido en Pedralba: Francisco, hermano de Manuel y concejal de Espacio Público en el mismo consistorio catalán.

Aunque nació en Pedralba un 4 de mayo de 1961, las raíces del alcalde de Sabadell no están en Valencia sino en Granada. De allí vinieron sus abuelos y sus padres para encontrar un trabajo en las huertas y, sobre todo, en los viñedos de la ribera del Túria. Un vecino aseguraba ayer que «El Medallero» fue guarda en una masía y sus hijos, entre ellos el padre de Manuel, se dedicaron al campo. Pero era difícil prosperar. Tanto es así que, tal como señalaba otro familiar, el regidor del PSC creció en una «cambra», que es como aún se denomina en muchos pueblos de la Serranía a la parte alta de las antiguas casas de labradores.

Los padres de Manuel decidieron volver a emigrar para mejorar su situación. Pasaron varias temporadas de la vendimia en Francia, pero pronto se instalaron con sus tres hijos varones en Barcelona. Tal como evocaba Manuel en una entrevista concedida en 2009, «vine a Sabadell cuando tenia 8 años, así que los pocos recuerdos que tengo de mi pueblo natal son de las vacaciones que pasábamos en agosto». Debió de ser durante alguno de aquellos agostos cuando jugó con Vicente, otro pedralbino que ayer se acordaba de haber pasado más de una tarde con los Bustos bañándose en el Túria. «Desde entonces, apenas lo hemos visto por aquí».

Efectivamente, una vez terminados los veranos infantiles, las visitas de Manuel a su pueblo se fueron espaciando en el tiempo. Marisa, su prima, asegura que apenas se ha encontrado con él en el entierro de algún familiar. «Con su hermano Paco sí que he hablado más a través del Facebook».

El exalcalde Abel Garrido también recuerda que en 2001 invitó a Manuel a las fiestas de San Antón. «Yo acababa de entrar y él era alcalde socialista de una de las ciudades más importantes de Barcelona. Vino un par de días y estuvo recordando cosas de su infancia».