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Los esfuerzos que ayuntamientos y Generalitat han destinado a combatir al picudo rojo no han conseguido los logros deseados. Miles de palmeras son infectadas por este insecto, aunque los nuevos tratamientos que combinan la aplicación de insecticidas en el interior del tronco y la emisión de microondas que elevan la temperatura abren la puerta a un posible control de la plaga.

LA RIBERA

En Sueca ha afectado a espacios emblemáticos de la población

En el caso de Sueca, la plaga del picudo rojo ha afectado a ejemplares que existían en el edificio modernista del Asilo de Ancianos Desamparados, el Passeig de l’Estació, el entorno de la iglesia de Sant Pere, declarada Bien de Interés Cultural, y el cementerio municipal. Mención especial merece el paseo de acceso a la playa de Les Palmeres donde la proliferación del insecto puso en peligro los árboles que dan nombre a este centro de veraneo. El ayuntamiento está tratando 228 ejemplares de propiedad municipal de datilera y canariensis con una inversión de 100.000 euros anuales. Se ha conseguido estabilizar la plaga.

En Cullera, ha habido que talar 10 palmeras del centro y en el paseo marítimo. Otras tantas también se han visto afectadas, pero se han podido salvar finalmente. El ayuntamiento está aplicando, cada 35 días, un producto fitosanitario denominado «confidor», que elimina al insecto en todas sus fases, aunque, no sirven de mucho estos esfuerzos si los vecinos que tienen en propiedad alguna palmera no la tratan.

En Albalat de la Ribera, el picudo ha puesto en peligro lo que para el municipio es todo un emblema: el palmeral de la travesía de la carretera de Algemesí a Sueca. Hasta el punto de que la Conselleria de Infraestructuras anunció recientemente que iba a tomar medidas drásticas porque algunas de las palmeras podían caer sobre la vía. Ello motivó la airada reacción del ayuntamiento que quiere conservarlas a toda costa. Alzira ha tratado este otoño unas 140 palmeras afectadas, de las que más de la mitad posiblemente no se salvarán. El consistorio ha cortado en tres años cerca de 170 ejemplares. Alzira cuenta con 2.000 palmeras de las que el picudo rojo «se ha cargado más del 20 %».

L’HORTA

Nuevo tratamiento con una pintura insecticida

En Torrent existen 1.000 palmeras en espacios públicos propiedad del ayuntamiento y de otras administraciones. De éstas, unas 200 están en tratamiento preventivo. Una pequeña parte porque ya están afectadas por el picudo rojo y el resto porque son de las variedades susceptibles de enfermar. En los últimos cinco años se han talado 40 palmeras a causa del picudo.

En Alaquàs la proporción todavía es mayor. El término municipal tenía unas 380 palmeras de las que han tenido que talarse 54. En Paterna, hay alrededor de 2.000, del tipo phoenix canaria y phoenix dactylifera, que son las más propensas a sufrir el ataque. Sobre estas palmeras se efectúan 10 tratamientos anuales con insecticida imidaclorid y clorpirifos. También se utiliza un hongo parásito denominado «boueriana» que ataca al escarabajo. Los resultados han sido muy buenos hasta la fecha, pues se ha logrado estabilizar la plaga. E

LA SAFOR

Gandia entrega 50 € por cada palmera infectada que se corte

La batalla contra el picudo rojo en la Safor se sigue librando palmera a palmera y, en algún caso, se ha tenido que desistir. El ejemplo más reciente tiene por escenario Gandia, donde el ayuntamiento ha tenido que renunciar a su proyecto de sustituir las moreras de la primera línea de playa por palmeras. Lo cierto es que Gandia lo ha intentado todo para acabar con el picudo. Desde el año pasado, el ayuntamiento entrega 50 euros a cada propietario que corta y destruya las palmeras infectadas que tengan entre 3 y 5 metros de altura. Para los aún más altos, la subvención es de 70 euros.

En Oliva, el ayuntamiento ha organizado cursos para enseñar a los ciudadanos cómo combatir esta plaga. Asimismo, Tavernes lleva a cabo un plan de combate del pic

do en cuya elaboración estuvo asesorado por los técnicos del Palmeral de Elx. Consiste en un tratamiento que combina la pulverización con la inyección de insecticida directamente a la copa de la palmera.

LA MARINA

El parásito ha hecho estragos en Xàbia y Dénia, a gran velocidad

El parásito ha hecho estragos en las palmeras de la Marina Alta. Los jardineros consultados por este diario afirmaron que más de la mitad han muerto o están infectadas. Este insecto se ha propagado a una velocidad increíble desde que a finales de 2009 se detectaran las primeras palmeras con picudo en Xàbia y Dénia.

MORVEDRE

Pulverización y endoterapia para vencer al picudo en Sagunt

La plaga del picudo rojo en las palmeras de propiedad municipal de Sagunt «está controlada». Así lo afirma Enrique Catalá, responsable de la empresa municipal que se hace cargo de la jardinería, la Sociedad Anónima de Gestión (SAG). Desde que en 2009 se iniciara el tratamiento, la plaga se ha estabilizado afectando en la actualidad a un 3 % de la palmeras públicas.En 2010 la administración local dejó de tratar con fondos públicos las palmeras que se ubican en propiedades privadas, dado el costo que suponía hacerlo y que se elevaba a cerca de 150.000 euros. En cuanto al tratamiento que se aplica en la actualidad, hay dos sistemas: si es importante, se opta por la pulverización, mientras que si es de grado medio, desde la SAG se aplica la endoterapia, que consiste en perforar el tronco para insertar unas pipetas que permitan inyectar un insecticida que actúa como veneno.

CASTELLÓ

Más de 7.200 palmeras afectadas y 84 millones en pérdidas

La plaga de picudo rojo ha afectado ya a más de 6.000 palmeras en la provincia de Castelló y a alrededor de 1.200 en la capital de la Plana. Estas cifras se traducen en pérdidas económicas de más de 70 millones en la provincia y de alrededor de 14 millones sólo en la capital de la Plana.

LA COSTERA

En Xàtiva se han visto afectados al menos 200 árboles

La caída de ventas y el picudo rojo han acabado con el 70 % de los huertos de palmeras de la Costera y la Canal de Navarrés. Los agricultores padecen más la crisis que los viveristas profesionales.

En cuanto a los tratamientos, Canals ha llegado a un acuerdo para reducir el coste en un 50% de los tratamientos que los propietarios privados realicen en sus árboles afectados.

La población ha optado por el sistema de microondas. En Xàtiva, de las 260 unidades, se han visto afectadas al menos 200.

VALENCIA

La plaga está «más controlada» este año que en 2011

Valencia es una de las ciudades que más ha sufrido la plaga. El 14 % del arbolado de la ciudad son palmeras. Fuentes de la Concejalía de Parques y Jardines explican que aplican insecticida de contacto y nemátodos, unos insectos que se alimentan del picudo. Además, señalan que todos los meses aplican tratamientos curativos y 6 preventivos en este 2012. En concreto, un 10 % de las 2.800 palmeras canarias de la ciudad se encuentran con tratamiento curativo. Las mismas fuentes señalaron que las zonas más afectadas son las perimetrales, cercanas a otros municipios, y se mostraron convencidas de que este año la plaga «está más controlada que otros años». La poda comienza estos días para aprovechar que el frío aletarga al escarabajo.

Las microondas se muestran efectivas en l’Alcúdia y el Perelló

Lo venden como el tratamiento definitivo y, en el Perelló y l’Alcúdia ya ha demostrado su efectividad. Un anillo enorme con placas que emiten microondas eleva la temperatura interior de la palmera y esta «fiebre» mata al picudo rojo «en todos los estados de desarrollo» en una media hora, destaca Dimitris Condodinas, presidente de la Asociación de Entomología de Grecia. Este científico, doctor y profesor de la universidad en Grecia, ha realizado una investigación acerca de este novedoso sistema, inventado por el italiano Luca Bernabei y bautizado como Ecoring, y certifica su efectividad. El calor que producen las microondas no sólo destruye al escarabajo, sino que logra penetrar en las pupas, una especie de nido a base de fibras donde se desarrolla la larva, así como en los huevos.

Información elaborada por

N.M., L.S., C.G., E. Melero, P.F., C. Alós, P.Bohigues, M.Romero, A.P, S.G., Á. S.