El minucioso detalle con el que los extesoreros del PP, Luis Bárcenas y Álvaro Lapuerta, anotaron la entrada y salida de dinero de la supuesta caja B del Partido Popular desvela, entre otros, los presuntos pagos realizados por la familia de Juan Cotino, actual presidente de las Corts Valencianes, a través de su empresa familiar de servicios, Sedesa. En concreto, los documentos desvelados hoy por el diario El País concretan que el 11 de marzo de 2004, coincidiendo con los trágicos atentados del 11-M, se realizó un ingreso de 200.000 euros al PP.

Preguntado por la cuestión esta mañana, Juan Cotino ha manifestado tajante "niego que yo diese ningún importe al partido político". Sin embargo, el presidente de las Corts no ha querido pronunciarse sobre si la empresa de su familia realizó el pago como consta en la presunta 'contabilidad b' hecha pública hoy.

Asimismo aparecen registrados los pagos efectuados por Pablo Crespo, cabecilla de la 'trama Gürtel' y actualmente imputado junto a Álvaro Pérez, «el bigotes», y Francisco Correa por la presunta financiación irregular del Partido Popular en la Comunitat Valenciana que investiga el TSJ de Valencia. Los ingresos de Crespo, según la documentación de Luis Bárcenas publicada hoy, se inician ya en 1999 con una aportación a las arcas populares de 21 millones.

Además, otro presunto receptor habitual de los pagos fue Federico Trillo, responsable jurídico del Partido Popular durante años. El exministro de Defensa recibió entre otros un pago en 2009 de 69.000 euros para asesoría jurídica de altos cargos del PP en el Caso Gúrtel. Trillo fue uno de los dirigentes del PP que se mantuvo cercano a Francisco Camps "como un amigo" durante el escándalo de los trajes que terminó con la dimisión del expresidente de la Generalitat el 20 de julio de 2011. El día de su dimisión, el hombre enviado por Génova para gestionar la crisis institucional fue el diputado por Alicante.