El débil destello de la buena noticia del ahorro de 306,8 millones que la Conselleria de Sanidad consiguió en 2012, al reducir en un 14,71 % el gasto farmacéutico de las recetas de la Seguridad Social respecto al año anterior, se ha visto empañado al hacerse pública la deuda con Farmaindustria, que a finales del año pasado ascendía a 530,1 millones de euros en medicamentos y productos farmacéuticos y fungibles servidos a los hospitales de la red pública sanitaria.

El balance entre lo que se ha ahorrado en las prescripciones de los médicos de atención primaria y la factura de la farmacia hospitalaria pendiente de pago arroja un saldo negativo de 225 millones de euros para la conselleria que dirige Manuel Llombart, que hoy tendrá que abonar a los titulares de las oficinas de farmacia 133 millones de euros de las recetas dispensadas en agosto y septiembre del año pasado.

La Comunitat Valenciana con una demora en el pago de 372 días -un año largo- a Farmaindustria es la autonomía más morosa del conjunto nacional, según refleja el último registro de la federación, que sitúa a Castilla La Mancha en el segundo lugar, con 316 días, y a Galicia en el tercero con 307 días de retraso.

El Observatorio de la deuda de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) tampoco aportó ayer buenos datos para los gestores sanitarios de la Comunitat Valenciana que, con una deuda de 430,84 millones, se convierte en la tercera autonomía con mayor volumen de impagados. La demora media en el pago que asciende a 282 días también salta las barreras de los 60 días contemplados en la legislación europea, lo que genera numerosas demandas judiciales y el consiguiente pago de elevadas cantidades de intereses.

Farmaindustria y Fenin eclipsaron ayer con sus respectivos datos de morosidad el frágil optimismo que el Ministerio de Sanidad intentó trasladar con sus indicadores de reducción de los gastos farmacéuticos mensual y anual.

El departamento que dirige la ministra Mato destacaba que por primera vez en los últimos ocho años se había cerrado el año con un gasto en farmacia de 9.769 millones de euros, un 12,26 % menos que el año anterior y, lo más importante, que se había bajado del techo de los 10.000 millones anuales en consumo farmacéutico farmacia. Un dato sin duda irreal porque omite la deuda de 3.213 millones que las comunidades autónomas contrajeron con la otra cara del gasto farmacéutico, que es la de los suministros hospitalarios, cuyo gasto se mantiene estable y sin disminución.

La Conselleria de Sanidad apuntó ayer a Levante-EMV que el año pasado se hizo un esfuerzo importante al reducir casi un 60 % la deuda con Farmaindustria que ascendía a 1,292,5 millones y que a finales de año se ha quedado en 530,1 millones, que se pudo abonar con el Plan de pago a Proveedores. "La idea -agregaron fuentes oficiales- es seguir acortando las cantidades, al igual que con el resto de los proveedores".

En lo que respecta a la prescripción de recetas, la Comunitat Valenciana rebajó la factura del pasado mes de diciembre en un 19,88 % lo que representan 23 millones menos respecto al mismo mes del año anterior.

El coste medio de receta se redujo en diciembre un 1,61 euros, al pasar de 11,78 euros de promedio a 11,59. El número de prescripciones ordenadas durante el último mes del año pasado también cayó un 18 %, al emitir 1.844.143 recetas menos.