Más de 300 políticos españoles están hoy imputados por casos de corrupción. Este problema se ha convertido ya en el cuarta preocupación de los españoles, según el último barómetro del CIS. Términos como prevaricación, cohecho, malversación de caudales públicos, blanqueo de capitales, falsedad, estafa... forman parte de todas las tertulias junto con la idea generalizada de que la gran parte de implicados se van «de rositas» por la dificultad de probar ante un juez los hechos de los que se les acusa.

Contribuir a poner coto a esta impunidad es uno de los objetivos que se ha planteado la Universitat de València al lanzar la primera edición del Diploma de Postgrado y Especialización en Investigación y Prueba de los Delitos Económicos y Relacionados con la Corrupción, pionero en España, que comenzará el próximo 13 de marzo, cuya puesta en marcha adelantó en exclusiva Levante-EMV.

El curso de 9 meses (600 horas), que se impartirá a distancia a través de internet, está dirigido a abogados, economistas, periodistas, miembros de la judicatura y Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. La matrícula estará abierta hasta el 25 de febrero, señalando la directora del diploma, la profesora de Derecho Penal de la Universitat de Valéncia, Ángela Matallín, que ya se ha inscrito «más gente de la que esperábamos».

Matallín destaca que lo fundamental para combatir la corrupción es «la formación a todos los niveles, empezando por los periodistas que informan de estos casos a través de filtraciones, la policía, que además debe contar con los medios adecuados, y los jueces, que han de instruir procesos judicialmente correctos». Se trata, añade, de delitos «muy difíciles de perseguir, investigar y probar, por lo que es necesario formar a especialistas». Además, la directora del curso pone el acento en el «insuficiente número de jueces dedicados a estas conductas delictivas», pese a que «representan un alto porcentaje en el índice global de criminalidad».

La profesora relata que hoy en día, «en una situación económica de crisis, se investiga más la corrupción porque hay más conciencia social sobre este tipo de delitos». Sin embargo, reclama una mayor prevención de los mismos, algo que se puede conseguir «con una legislación, persecución y castigo adecuados». «Si el delincuente piensa que va a salir indemne, seguirá haciéndolo. Es decir, si hay impunidad habrá más delincuencia», concluye.

En su insistencia en más preparación a todos los niveles, Matallín incide en la necesidad de que en la fase de investigación «se obtengan pruebas judicialmente correctas» y en evitar los «defectos procesales». «El corrupto seguirá delinquiendo si sabe que por un defecto procesal saldrá indemne», recalca.

La directora del diploma detalla que durante el curso, además de «analizar desde todas las ópticas» casos de corrupción ya juzgados, no faltarán «procesos actualmente sub judice» que se «estudiarán desde una perspectiva académica».

El curso aborda la legislación internacional

El profesorado que impartirá el diploma en corrupción está compuesto por docentes del Departamento de Derecho Penal y del Instituto de Criminología de la UV, además de por profesionales especializados en la investigación y represión de estas formas de criminalidad. Entre las materias que se abordarán destaca el derecho penal internacional y de la UE en la regulación de los delitos económicos y relacionados con la corrupción, así como su investigación. En este sentido, los alumnos conocerán los medios de investigación de este tipo de delitos, cómo se realizan los informes de inteligencia financiera y los principales ejes de la investigación bancaria y patrimonial. Entre los delitos que se estudiarán también está el abuso o uso indebido de información privilegiada, el tráfico de influencia y la negociación prohibida a los funcionarios. R. M. valencia