El Tribunal Supremo (TS) ha reprendido a la Audiencia Provincial de Castelló por excluir el cohecho del caso Fabra. Y acusa al tribunal provincial de emplear "estrategias extemporáneas" para eliminar este delito del proceso y entiende que "cercenó de forma indebida" las facultades de la acusación. Por ello, da vía libre al juez para encausar a Carlos Fabra por los delitos que estime oportunos, incluido el cohecho.

Ayer se conoció el contenido íntegro de la sentencia, cuyo fallo ya se avanzó en febrero.La Sala de lo Penal del TS acordó otorgar "absoluta libertad" al juez de Nules Jacobo Pin para dictar un nuevo auto de apertura de juicio oral al expresidente provincial del PP y de la diputación, Carlos Fabra. El Supremo atiende así parcialmente los tres recursos planteados por la Abogacía del Estado, el Ministerio Fiscal y la Unión de Consumidores contra el auto de la Audiencia Provincial del 18 de mayo, que excluyó el cohecho. En sus razonamientos, el alto tribunal da un nuevo tirón de orejas a la Audiencia de Castelló. Considera que a estas alturas del proceso son "claramente extemporáneas las estrategias relativas a la interpretación del delito de cohecho, cuestión que debe quedar reservada para el plenario sin anticipar decisiones en este momento, lo que en modo alguno es admisible". Subraya que corresponde a la acusación fijar el objeto del proceso y añade que el auto de la Audiencia "ha cercenado de forma indebida las facultades de la acusación". También considera que ha habido un "flagrante violación del derecho a la tutela judicial efectiva" al obligar a elegir un tipo de procedimiento como consecuencia del archivo del cohecho.

La resolución supone un espaldarazo al juez instructor, que pidió el amparo del Poder Judicial y denunció que la sección primera de la Audiencia de Castelló había "perturbado su independencia" al tratar de imponerle el archivo del cohecho. Tras notificarse la sentencia del TS, el juez de Nules tiene ya las manos libres para dictar un nuevo auto de apertura de juicio. De esta forma, Carlos Fabra será juzgado por cohecho, tráfico de influencias y cuatro delitos fiscales. El caso estalló a finales de 2003 y ha tenido nueve jueces instructores hasta que se cerró la investigación en 2012.