En Vila-real se detectó recientemente la presencia elevada de un herbicida, bromacilo, en el agua de uno de los pozos de la ciudad aunque tanto los responsables municipales como la empresa gestora del servicio de aguas potables en la localidad, Facsa, aseguraron que en ningún momento los vecinos corrieron peligro ya que los niveles detectados no suponían ningún riesgo para la salud.

La solución que se tomó fue la conexión al suministro del consorcio de aguas de La Plana para disminuir la concentración de esta sustancia a niveles que no superaran el límite legal. En el caso de que persista el problema, desde el ayuntamiento indicaron que se instalarían unos filtros de carbono en la Bassa del Poble, foco del problema, para solucionar definitivamente la situación. Según consta en un informe municipal, la concentración de bromacilo en la Bassa del Poble superó o igualó siete veces el tope permitido por ley, 0,1 partes por billón (ppb), durante los meses de julio a noviembre de 2012. Este estudio atribuye la concentración de este herbicida a las lluvias caídas desde septiembre que habría provocado la filtración del compuesto a los canales de agua de la ciudad.

Burriana se abastece de agua potable por medio de captaciones subterráneas ubicadas en el mismo término municipal, una planta potabilizadora por ósmosis inversa y la aportación del Consorcio de Aguas de La Plana. Los caudales son elevados hasta el depósito general de regulación, de 6.000 m3 de capacidad, situado en el Camí d´Onda, en la que se realiza el tratamiento de desinfección del agua mediante adición de hipoclorito sódico.

Al estar este depósito a la misma cota que el casco urbano, el sistema de distribución no puede ser por gravedad, debiendo impulsarse el agua por medio de electrobombas.

El Ayuntamiento de Burriana cuenta con una planta potabilizadora por ósmosis inversa. El suministro de agua potable cuenta además con los pozos B5 y B6 localizados en la zona norte del municipio desde donde se canaliza este aporte hasta el depósito general. En el último mes, en previsión de la aparición de algún contaminante, se ha proyectado la instalación de una planta potabilizadora. El tratamiento elegido es el paso del agua por filtros de carbón activo y está previsto que dicha planta entre en funcionamiento en antes de mayo de 2013 con una capacidad máxima de producción de 3.600 m3/día.

Las fugas en las canalizaciones que abastecían la zona norte de Borriol obligaron a la gestora del agua a plantear una revisión al alta del contrato de suministro para paliar unas pérdidas que cifraron en dos millones de euros. Tras varias reuniones y un corte del suministro, se acordó incrementar el precio del servicio un 15 % para reparar las instalaciones que gestionarán los regantes cuando se constituyan en comunidad.