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El Gobierno Valenciano deberá explicar en les Corts las razones por las que desde hace años varios caminos públicos y senderos que figuran en el registro público de la propia Generalitat han sido cortados impunemente por propietarios particulares.
Entre estos caminos figuran algunas vías pecuarias en el término municipal de Ayora y el sendero internacional GR-7, que fue cortado en 2007 entre los municipios de Chera y Requena.
El Grupo Parlamentario Compromís ha exigido al Consell que garantice que todas las sendas y caminos que transcurren por los montes valencianos y que han sido cortados por particulares sean accesibles a todos los usuarios.
Los parlamentarios de Compromís han presentado una Proposición no de Ley en Les Corts en la que instan al Consell a actuar "con celeridad" recuperando los caminos y sendas públicas, "garantizando su accesibilidad" a los senderistas.
La formación política pide la apertura de los caminos y sanciones para quienes impiden su uso.
El portavoz adjunto de Compromís, Juan Ponce, recordó ayer en una nota el contenido de un reportaje de Levante-EMV en el que se desvelaba el corte del Sendero de Gran Recorrido GR-7 en Requena por parte de los propietarios de la finca Casa Vieja, en Requena.
El sendero, que cruza Europa desde Delfos hasta Tarifa y la Comunitat Valenciana desde Fredes a Pinoso, figura en el catálogo oficial de senderos de la Generalitat, que ha invertido fondos públicos en su mantenimiento y señalización. Sin embargo, al menos desde 2007 permanece cortado sin que la Generalitat haya actuado.
Unos pocos kilómetros antes de introducirse en el término de Chera, los beneficiarios del alquiler del Monte público "la Sierra", propiedad del municipio de Loriguilla, aunque gestionado hasta ahora por la Generalitat, han iniciado el vallado de amplias zonas del citado municipio con el permiso del gobierno valenciano. El vallado corta un nuevo tramo del GR-7 y encierra un refugio de montaña que hasta hace unos meses era de acceso público.
En Ayora, recuerda el diputado, los vecinos reivindican desde el año 1996 la apertura de decenas de caminos públicos que han sido cortados en tramos que suman centenares de kilómetros".
Juan Ponce recordó al respecto que montes y caminos son bienes públicos "de todos y tenemos que disfrutarlos todos".
