Una funcionaria de la extinta Conselleria de Solidaridad, Begoña López, reveló ayer a la juez del caso Cooperación que le obligaron a manipular pruebas. Begoña López compareció como testigo a petición propia porque sentía la necesidad de informar a la magistrada de las "cosas raras" que se hacían en la conselleria durante la etapa de Rafael Blasco. La funcionaria indicó que el imputado Xavier Llopis, considerado como la mano derecha de Blasco, le ordenó que hiciera un listado con facturas que supuestamente se pidieron a la Fundación Cyes para "lavar" la compra de pisos en Valencia con los fondos que se debían haber utilizado para pozos de agua en Nicaragua.

La testigo insistió en que ella no sabía nada del trasfondo ni que pudiera estar cometiendo algo irregular. La funcionaria trabajaba a las órdenes de la ex secretaria general de Solidaridad Tina Sanjuán. La comparecencia voluntaria de Begoña López se ha producido tras la imputación de Xavier Llopis y de la funcionaria Amparo Isarria por supuesta relación con la falsificación de la documentación remitida a la Fiscalía sobre los expedientes a la Fundación Cyes. Fuentes próximas al caso vincularon la posibilidad de que la testigo compareciera ayer de forma voluntaria ante el temor de una futura imputación.

El inspector de Hacienda que elaboró el informe sobre cómo actuaban las empresas de la trama ya confirmó a la magistrada que las firmas aportaron facturas falsas para justificar trabajos no realizados.

La magistrada unió hace unas semanas a la causa una serie de correos entregados por la ex jefe del servicio de cooperación Lola Escandell que revelan las maniobras de los responsables de la Conselleria de Solidaridad para ocultar los expedientes G001/2008 y G002/2008 de las subvenciones a la Fundación Cyes. El ex director general de Cooperación Josep Maria Felip confirmó a la juez que Blasco le obligó a ocultar los expedientes.

Por otra parte, el fiscal Anticorrupción considera que persisten los indicios contra el exconseller Rafael Basco y se ha opuesto a su petición de quedar fuera de la causa. En un escrito de cinco folios, que contiene abundante jurisprudencia, el fiscal advierte de que no es "el momento procesal adecuado" para dejar fuera del caso Blasco. El abogado de Blasco pidió a la magistrada que lo dejara fuera de la causa al "no existir pruebas" de que cobró de la trama.

Además, la juez ha cedido a las presiones de los abogados defensores y ha accedido a que obtengan copias en vídeo de las declaraciones. Pía Calderón justifica su rectificación ante "las dificultades insalvables para obtener transcripciones de las declaraciones efectuadas en un plazo razonable". Las transcripciones, como adelantó Levante-EMV, están bloqueadas por la falta de medios.