Cuatrocientos cincuenta trabajadores de limpieza en La Fe y 350 del Hospital General de Alicante han presentado demandas contra la contratista Esabe, investigada por un fraude con la Seguridad Social de unos 30 millones de euros y por presuntamente haber pagado sobornos a un cargo de la Conselleria de Sanidad. Los antiguos empleados reclaman los impagos del último mes de trabajo y de la liquidación de las pagas extra y las vacaciones, según explicaron fuentes de CC OO. Los denunciantes solicitaron a la Generalitat que dejara de abonar los pagos a la mercantil que daba el servicio en estos dos centros sanitarios por estos incumplimientos.

Estos 800 trabajadores formaban parte del contrato que consiguió Esabe en Sanidad por 35 millones de euros en 2008 para la limpieza de centros de salud y hospitales, entre ellos los dos más grandes de la Comunitat Valenciana: el Hospital General de Alicante y La Fe. La mercantil tenía experiencia en el sector de la seguridad, pero esta era una de las primeras adjudicaciones en este tipo de servicio. Uno de los directivos y empleados detenido por la policía aseguró que la empresa consiguió contratos con Sanidad pese a sus deudas con la Seguridad Social porque presuntamente habría pagado sobornos a un cargo de este departamento.

Fuentes de Comisiones Obreras explicaron que tras la salida de Esabe de este contrato por problemas financieros a principios de 2012, el servicio y los empleados fueron subrogados por otra sociedad, les dejó de pagar. De esta manera les adeuda el mes de febrero de 2012 y las liquidaciones de las vacaciones y la extra. Los 800 trabajadores han presentado una demanda individual que se ha repartido por juzgados de lo civil de Valencia y Alicante.

Las mismas fuentes explicaron que mandaron en su día una carta a la Conselleria de Sanidad para que no abonara parte del contrato a Esabe si no pagaba primero las deudas con sus trabajadores. "Ni nos contestaron", aseguraron desde el sindicato.

La empresa Esabe tiene hasta cinco expedientes abiertos por la Conselleria de Empleo por impagos. Esas denuncias y las deudas con la Seguridad Social no evitaron que en 2011 ganara un concurso de 11 millones.