El juez Castro ha trasladado al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana la parte del caso Nóos que afecta a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y al expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, después de que ayer las Corts Valencianes confirmaran al juez la condición de aforados de ambos diputados.

El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma apunta a la existencia de indicios de los que Camps y Barberá tuvieron una "decisiva e imputable intervención" en las negociaciones previas del evento Valencia Summit, por el que el Instituto Nóos percibió alrededor de tres millones de euros públicos.

En el auto que ha dictado este miércoles para proponer al TSJCV que asuma la competencia para instruir esta parte del caso Nóos el juez recuerda que ya cuando acordó la fianza civil de 8,2 millones para los exresponsables de Nóos Iñaki Urdangarin y Diego Torres, manifestó que había indicios "razonables" de que en Valencia "había tenido lugar una serie de hechos de apariencia delictiva".

Los nombres de Camps y Barberá han aparecido en varias ocasiones a lo largo de la instrucción de la causa relacionados con la celebración del Valencia Summit, por cuyas tres ediciones el Instituto Nóos presidido por Iñaki Urdangarin percibió unos tres millones de euros -1,044 millones por cada edición-, pese a que el coste real de cada una de ellas oscilaría alrededor de los 300.000 euros, según los investigadores.

El magistrado justifica que entonces los hechos se centraban en la intervención que en ellos habían protagonizado ambos exsocios, "no porque se estimara que los indicios de criminalidad recayeran exclusivamente sobre ellos, sino sencillamente porque eran el obligado centro de atención", ya que la Fiscalía había pedido fianza sólo para los dos imputados "y carecía de sentido" que la acusación "se hiciera extensiva a la directa alusión a otras personas respecto de las que ninguna petición se había planteado".

Tras ello el exsocio de Urdangarin, Diego Torres, remitió un escrito ante el juez en el que de forma pormenorizada relata cómo se desarrolló la reunión que ambos mantuvieron con Camps y Barberá en el palacio de Zarzuela para abordar la organización del proyecto y exponer los objetivos perseguidos por Nóos.

Si el TSJCV acepta finalmente investigar, en calidad de imputados, a Camps y Barberá se quedará con la parte valenciana del caso Nóos, incluidos los empresarios y exaltos cargos de la Generalitat valenciana que ya están encausados. Castro se reserva el derecho a recuperar la parte de la investigación trasladada al TSJCV si éste finalmente no encontrara indicios de delito en las actuaciones de Camps y Barberá, para continuar así con la parte de la investigación que, relacionada con la Valencia Summit, no afecta a diputados o aforados valencianos.