Tras dos cursos sin poder pagar las becas de libros, la consellera de Educación, Mª José Català, ratificó ayer que este año no habrá convocatoria de ayudas abierta a todas las familias. Las becas se reducen, según la consellera, al alumnado de Educación Especial y de los Centros de Atención Educativa Singular (CAES). Para los casos de extrema necesidad, Educación habilitará una partida, aún sin cuantificar, que entregará directamente a los colegios "para comprar lotes de material, que quedarán en propiedad del centro". El fin es crear un banco de libros. El dinero, añadió, "se repartirá en función de la realidad social de cada centro, que se sabe por las becas de comedor".

En cuanto a las ayudas impagadas, la consellera informó de que hoy ingresará a familias y libreros 15 millones de ayudas del curso 2011/2012. Respecto los 27 millones de las becas de este pasado curso que debe a 238.057 alumnos de Primaria y ESO, aseguró que está "trabajando para poder hacer frente a ese pago a lo largo de este curso". Català justificó la supresión de las ayudas de libros por "el esfuerzo en mantener las becas de comedor, que van aumentar ligeramente por la entrada de la concertada, y las de transporte, que mantendrá las rutas 600 actuales".

La Plataforma en Defensa de l'Ensenyament Públic anunció ayer que comenzará el curso el lunes con un "abrazo" a los colegios públicos contra los recortes y la Lomce. En dicho acto, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Padre de Alumnos (FAPA) de la provincia de Valencia, Eva Grimaltos, consideró "discriminatorio" el fin de las becas de libros, porque "los recortes los están pagando nuestros hijos".