¿Cree que le han condenado por hablar valenciano?

Evidentemente, porque se genera un conflicto al que en la sentencia no se alude, a pesar de que en el mismo juicio se sacó relucir que uno de los agentes dijo que era de Ciudad Real y que no entiende el valenciano. Se da a entender que sí hay un conflicto en este sentido.

¿Pero la sentencia sólo habla de desobediencia a la autoridad?

Exactamente. Lo que yo digo es que yo seguiré hasta el final diciendo que se me condena por hablar valenciano. Para mi, al crearse ese conflicto de identidad y lingüístico, se acogen a denunciarme por cosas que no son reales: cinturón de seguridad, el chaleco reflectante y por negarme a las pruebas de alcoholemia, a pesar de que sí que las hice. El otro agente que vino más tarde, que era más mayor y casualmente fue educado conmigo, me dijo: «¿quiere hacer usted la pruebas de alcoholemia y drogas?». Y yo le contesté: «¿va usted a empujarme, humillarme, amenazarme o insultarme?». Y el me dijo que no. Y entonces yo le dije que sí, que sin problema, y las hice y di negativo.

¿Puede contarnos cómo empezó el conflicto?

Yo quedé con la madre de mi hijo para recogerlo a las 5 de la tarde. Salgo para tomar la rotonda de la CV-18 en Almassora y volver a incorporarme para recoger a mi hijo, porque íbamos a pasar la tarde. Si yo hubiera ido drogado o bebido, o sin cinturón, hubiera salido por otro sitio y no por la rotonda, pero no tenía nada que esconder, así que pasé por el control sin preocuparme. Cuando me paran lo primero en mi cabeza era llamar a mi hijo y les dije: «Disculpen, voy a llamar a mi hijo para avisarle». El guardia me dice: «los papeles», y yo le respondo en valenciano que necesito buscarlos porque estoy en el coche de mi cuñada y no sé exactamente dónde están. Y en ese momento el agente me dijo: «a mí me hablas español que estamos en España». Ahí comenzó el conflicto.

¿Qué ocurrió entonces?

Yo le respondí: escuche, tengo todo el derecho a hablar mi lengua porque estoy en mi tierra. Y él me contestó: «aquí se habla español, esa lengua yo no la entiendo». Y vino otro compañero y me cogió del brazo y me empujó contra el coche de mi cuñada. Yo me giré y le dije que no lo volviera a hacer por favor. Y se quedó ahí. No me dijeron que soplara ni nada. Me dijeron: «no te entendemos y ya vendrán a por ti». Y a partir de ahí, mientras yo estaba tranquilamente apoyado en el coche, me dijeron frases del estilo «hace 30 0 40 años tu ya estarías con un tiro entre los naranjos», «esta noche llegarás a casa sin puntos en el carné»; o «ahora vendrán a por ti y esta noche dormirás en el cuartelillo».

¿Cuánto tiempo estuvo retenido?

Hasta que vino el hombre de atestados, casi dos horas.

¿Quiere decir que la Guardia Civil le amenazó con multarle por otras cuestiones como represalia por hablar valenciano?

Claramente, claramente.

Por qué infracción se le multó y por qué se le ha condenado finalmente?

Al final, cuando yo estaba apoyado en el coche y con los nervios no llevaba el chaleco, y uno de ellos me dijo: «si no te pones el chaleco te multaremos también», y yo me lo puse enseguida y me hice fotos. Y en el atestado final me denuncian por no llevar cinturón, chaleco y por no querer someterme a las pruebas de alcohol.

Pero usted asegura que sí hizo las pruebas de alcohol.

Ya le dije que el agente que vino después me preguntó y yo las hice. Con este hombre fue todo correcto. Y me preguntó, «vols que te parle en valencià?» Yo le dije que ese no era el problema, sino los modos. Con ese hombre vi la luz, porque yo estaba atemorizado. Este mismo hombre en el juicio dice que en todo momento me vio con el chaleco y conmigo no hubo ningún problema de acceder a las pruebas de alcohol y drogas. Yo se lo agradezco.

¿Y cómo explica entonces que se le condene a prisión?

Se me condena porque la Fiscalía lo recurre, pero el juez primero me absolvió, aunque se me hizo pagar una multa por el cinturón, la alcoholemia y el chaleco. Se me condena por la política del miedo. Ahora me han condenado 6 meses a la prisión y 1 año y 1 mes sin carné, y el dinero de todas las multas que suman más de 1.000 euros.

¿Va a recurrir?

Lo estamos mirando, aunque el abogado me dice que es difícil.

¿Cree que hay una persecución contra el valenciano o es algo puntual?

Sí que hay una persecución. No solo por mi caso. Creo que es algo generalizado en jóvenes de los cuerpos de seguridad.