Ecologistas en Acción ha denunciado ante el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) la rotura del emisario submarino de Xàbia por sus posibles consecuencias sobre espacios marinos protegidos como la Reserva Marina del Cabo San Antonio y Els Penya-segats de la Marina, además de por posibles incumplimientos de la normativa de vertidos y de las directivas europeas sobre tratamiento de aguas residuales urbanas y calidad de las aguas de baño.

Los ecologistas sospechan que el emisario se encuentra roto desde hace semanas «probablemente, meses, incluso años», afirman en su denuncia sin que la Entidad Publica de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) ni las empresas responsables de la gestión de la depuradora de Xàbia hayan intervenido. Los denunciantes piden al Seprona la apertura de una investigación.

Carlos Arribas, portavoz de Ecologistas en Acción y firmante de la denuncia, asegura que los hechos podrían encajar en los tipos penales establecidos en los artículos 325 del Código Penal sobre vertidos irregulares y 332 que persigue la destrucción o alteración grave de los hábitats protegidos.

Ecologistas en Acción responsabiliza inicialmente del vertido a la UTE que gestiona la depuradora de Xàbia Sociedad de Agricultores de la Vega (SAV) y Depuración de Aguas del Mediterráneo (DAM) y subsidiariamente a la Epsar.

Tal como se evidencia en las fotografías que acompañan la denuncia, obtenidas el pasado 19 de septiembre, el emisario submarino de aguas residuales de Xàbia está vertiendo «aguas mal depuradas» a unos 1.260 metros de la playa del Arenal y a unos 20 metros de profundidad, con afección directa sobre las praderas de la protegida posidonia.

La rotura impide actuar a los difusores del vertido y por tanto no garantiza la inocuidad de las aguas residuales sobre la biota marina.

La denuncia incide en las inversiones realizadas por la Epsar en los últimos años para garantizar, presuntamente, el funcionamiento del emisario desde que en 1995 se adjudicaran las obras de mejora a Consomar. En 2003 la Epsar adjudicó obras de emergencia por valor de 177.190 euros y en 2005 adjudicó también a la citada empresa la asistencia para el control del funcionamiento de los emisarios submarinos existentes en la Comunitat Valenciana.

Carlos Arribas confirmó ayer que la denuncia contempla explícitamente el «grave» perjuicio que el vertido supone para «el medio ambiente marino» y también «para la salud pública» debido a la posible existencia de microorganismos (bacterias y virus) debido a su proximidad a una de las principales y concurridas playas de arena de Xàbia, la denominada el Arenal, que paradójicamente cuenta con la bandera azul.