El conseller de Sanidad, Manuel Llombart, eligió el escenario de la escuela de negocios IESE Business School de Barcelona para soltar la primera pincelada de lo que él denominó como «la tercera evolución» del marco contractual que la Conselleria de Sanidad mantiene con las empresas que gestionan los hospitales de la red pública en régimen de concesión administrativa, como el de Alzira, Manises, Denia, Torrevieja y Orihuela.
En su intervención, dentro del XX Encuentro del sector sanitario, que se celebró en la Ciudad Condal, Llombart destacó que el modelo de concesión administrativa que gestiona el 15 % de los departamentos de la C. Valenciana «necesita ir actualizándose».
Los cambios que Llombart quiere incorporar a este sistema de concesión administrativa de gestión privada de los hospitales públicos recorta las alas a la expansión de las empresas, según indicaron ayer fuentes de la conselleria.
Detrás de la tibia declaración de Llombart que solo dice que hay que modificar los contratos «para permitir la sostenibilidad del modelo y adecuar los pliegos a las circunstancias que se están viviendo» hay un claro y directo mensaje que consiste en que este grupo de hospitales, gestionados con estrategias privadas de rentabilidad, deben ceñirse a dar los servicios de la cartera básica y no prodigarse con unidades especializadas que ya existen en los hospitales de referencia de la red pública, según avanzó ayer a Levante-EMV un portavoz autorizado de la Conselleria de Sanidad.
Al parecer y según anunció el responsable sanitario en la jornada organizada también por la auditora KPMG, los directivos de las empresas concesionarias y de la conselleria han comenzado ya a esbozar las líneas de este nuevo marco contractual que será el tercero desde que en 1999 se abrió en Alzira el primer hospital de estas características de España.
Que no haya duplicidad de servicios y que, por ende, las facturas que las empresas privadas presentan al final de cada ejercicio no incluyan atenciones que se pueden dar en los hospitales de mayor rango de la red pública.
La conselleria abona un pago capitativo de 639 euros a las UTEs de las empresas que gestionan los cinco hospitales en régimen de concesión administrativa.
En su exposición, Llombart se refirió también a las 44 «enfermeras gestoras de casos» que atienden a 737.000 personas (un 14 % de la población) y cuyo seguimiento de los pacientes ha reducido en un 70 % las visitas a urgencias y los ingresos de pacientes con patologías complejas.
Por la tarde, Llombart participó ya en Valencia en el congreso de calidad asistencial que se celebró en el hospital La Fe.
