¿Qué opinión tiene del anuncio del cierre de RTVV?

Muy negativa. Esta gente que nos gobierna no reconoce nunca sus errores, ni analiza las consecuencias de sus acciones y omisiones. Están privando a todos los valencianos de un servicio público que nació con la vocación que recogía la ley de creación que este mismo gobierno ya derogó. Se ha demostrado la inutilidad del ERE. Aunque le echen la culpa a Rosa Vidal hasta en 10 puntos de una sentencia tremenda en la que le dicen a la Generalitat que peor no se han podido hacer las cosas.

¿Qué consecuencias puede tener esta decisión?

Leí en twitter a una persona que no sabría explicarle a su hijo que cerraban la tele y que jamás podría ver dibujos en valenciano. Es tremendo. No han medido las consecuencias. No se puede decir que con lo que valdría seguir la televisión valenciana se podrían hacer 40 colegios y 50 hospitales. Eso es pura demagogia. Porque ni vamos a tener tele, ni hospitales, ni colegios. Todo es mentira, es propaganda de este partido que nos malgobierna desde hace demasiados años y que ahora nos priva de una RTVV que no sólo deja fuera a los trabajadores en la calle, sino que deja huérfanos a todos los valencianoparlantes. No va a haber otra cadena que dedique su programación en nuestra lengua. La única oferta será en castellano. ¿Es eso lo que pretendían?

Su especialidad ha sido el deporte. ¿Qué futuro le augura a deportes como la pilota, el balonmano o a los equipos de Segunda B sin el sostén de una televisión pública?

En los últimos años la tele ya no pagaba derechos de imagen por la crisis, pero sí se seguía haciendo un servicio público a estos clubes para televisar sus partidos y atraer, por ejemplo, más publicidad estática, porque había una repercusión. Sin ir más lejos, para mañana estaba prevista la retransmisión de la final del Trofeu Individual de Raspall desde el trinquete de Piles, y esa partida ya no va a tener lugar. ¿Y quién va a hacer el día a día del Valencia, Villarreal, Levante o Elche? ¿Los Manolos que siempre están de guasa? Hay que salir a la calle y reclamar lo que es nuestro.

Está haciendo un llamamiento a la sociedad civil...

Correcto. La sociedad civil valenciana, no la que fue al acto de Fabra sino la real, la que ha salido estos días por primera vez en RTVV, como la Escola Valenciana y las víctimas del accidente del metro. La sociedad civil que se manifiesta es la que debe hacer recapacitar al partido gobernante. No me vale ese "prietas las filas" y que no haya ninguna voz pública discordante en todo el PP valenciano.

¿Se imagina esta situación en otras comunidades con lengua propia?

El presidente del PP gallego ha dicho que jamás cerrará la televisión gallega. ¿Que Ignacio González sí lo haga en Madrid? Pues bueno, allí todos hablan en castellano. Pero que cierre una televisión que representa a una lengua, cultura e identidad propias, como es RTVV, sin dejar capítulo a que se dialogue, me parece caciquil.

Los trabajadores se han sublevado...

No les han dado otra alternativa. A mí me supo mal que me echasen a la calle. No me dieron ninguna explicación, aunque ya sé la razón: por decir las cosas que digo en esta entrevista. Yo no le tengo miedo a nadie, no le debo nada al PP. Ya llevaba años en RTVV cuando llegaron a la Generalitat y aprobé una oposición. Pero la gente allí dentro se han visto que de la noche a la mañana se han quedado sin trabajo. Están haciendo una televisión asamblearia, que es la televisión que nos hemos perdido durante 18 años. Desde que me echaron en febrero no había vuelto a ver Canal 9 por una cuestión de higiene mental hasta el miércoles. Y me emocioné, con los debates plurales, sin corsés, ni comisarios políticos. Durará poco, lamentablemente.

Y llega tarde, también...

Ha llegado cuando nos hemos liberado de las cadenas. En una televisión jerarquizada, sólo había posibilidad de editar los vídeos tal como querían los jefes. Han sido engañados, porque han creído en el proyecto posterior al ERE y ahora se ven en la calle. La situación de todas las familias va a ser tremenda. La situación es para reaccionar como lo han hecho.

Usted pasó de ser la voz en mayúsculas de los partidos a quedar marginado...

Soy un profesional y voy donde me mandan. Si me tocaba cubrir al Ontinyent o al Olímpic iba muy a gusto y lo hacía con la misma ilusión que en Mestalla. Sí que me fastidió los cinco años que estuve sometido a "mobbing" por parte de los directivos. No sólo no me dirigían la palabra sino que no dejaban a otros compañeros que bajasen a tomar un café conmigo.

¿Quién le sometió a tal acoso?

No tengo ganas de decir nombres, pero él lo sabrá muy bien cuando lo lea. Ahora parece ser que le van a aplicar la misma medicina.

¿Cómo era aquella primera "casa" en la que empezó?

Fue una de las mejores épocas de mi vida. Estábamos pariendo algo nuevo, con gente con muchísima ilusión, con todo por hacer: informativos en valenciano, algo inédito, como las retransmisiones, los directos...

Su afonía y la de Paco Lloret en aquel gol de Robert al Madrid en el 92, o la final del agua ya forman parte de la memoria sentimental de los valencianos.

Sí. Aquella remontada del Valencia fue impresionante. La historia me coloca en el 95, en el Bernabéu. Aguantaba el micro con una mano y el cable con otra. Estábamos en directo, todo lleno de agua y los bomberos me avisaban que si continuaba hablando me podía electrocutar con un "esclafit". Me quedo también con el primer partido retransmitido en valenciano en septiembre del 89. Un Castellón-Madrid con gol de Butragueño.

¿Se volverá a tener la oportunidad de gozar de una tele pública y en valenciano, sin contar con un sistema financiero propio?

Si cumplen su amenaza pediré que el nuevo gobierno que salga de las urnas prometa antes de las elecciones que pongan en marcha una radiotelevisión pública, en valenciano y de calidad.