La Diputación Provincial de Valencia ha obtenido sobresaliente en transparencia durante 2013 mientras que la de Alicante ha logrado un notable y la de Castelló un aprobado, según los índices que elabora la organización Transparencia Internacional España (TI-España). Este colectivo mide, a través de 80 indicadores en seis áreas, el nivel de transparencia y la clasificación ha quedado liderada por León y Valladolid (100 puntos) y cerrada por la de Guadalajara, la menos transparente con 18,8. La Diputación de Valencia es la séptima más transparente con 93,8 puntos, mientras que la de Alicante es la vigésimo primera con 77,5 y la de Castelló es la trigésimo tercera con 53,8.
El presidente de TI-España, Jesús Lizcano, presentó ayer los resultados y destacó que una «asignatura pendiente» es la información económico-financiera, ya que la media colectiva es de 60,2 sobre 100. El área con menor puntuación por término medio es la referente a los indicadores de la nueva Ley de Transparencia, donde obtienen 58,7.
Las puntuaciones más altas se alcanzan en el área de relaciones con los ciudadanos y la sociedad (83,2), seguido de transparencia en las contrataciones de servicios (76,1); en materia de servicios y apoyo a los municipios (75,4) e información sobre la propia diputación (73).
El vicepresidente segundo de la Fundación Ortega-Marañón, que colabora con TI-España, Jesús Sánchez Lambás, defendió que las diputaciones son «casi imprescindibles» en el mundo rural y «piedra angular» en la prestación de servicios al ciudadano a través de los municipios.
