­El presidente de la Asociación Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (Arhoe), Ignacio Buqueras, es partidario de adaptar la jornada laboral al modelo europeo incorporando, como mucho, una hora para el almuerzo. También cree que es necesario acostarse antes y volver al «horario solar».

¿Cuál es el objetivo de su asociación?

Que España tenga unos horarios laborales más cercanos a los europeos, que permitan la conciliación de la vida familiar y que ayuden a la igualdad y a la responsabilidad laboral de los trabajadores, sin olvidar la productividad, claro.

¿Eso es posible?

Mire, España tiene una singularidad. Somos el único país con este tipo de horarios. Trabajamos más horas, pero también somos líderes en baja productividad. Nosotros defendemos una jornada continuada que comience a las siete y media o nueve de la mañana y finalice a las cinco o seis de la tarde, siendo flexibles, con una hora, como mucho de descanso, para almorzar.

De la siesta nos olvidamos…

La siesta es un tópico, pero es posible hacer siestas light de unos diez o doce minutos, que también recuperan el cuerpo y la mente. Lo que no entendemos es que haya que perder media hora de trabajo, en el mejor de los casos, por salir a desayunar. Eso es de país tercermundista.

¿Qué opina de los trabajadores que se ausentan unos minutos para fumar un cigarro?

Hay que respetar a todos los trabajadores. No veo nada malo en que un empleado salga de su puesto de trabajo para fumar un cigarro durante dos o tres minutos. El problema estará en si, en vez de un cigarro, son cuatro o cinco. Es muy importante la responsabilidad del propio trabajador.

¿Ayudaría a sus objetivos que adaptásemos nuestro reloj al horario de Greenwich?

Por supuesto. Es el primer paso para lograr unos horarios más racionales. Es que nos corresponde ese horario. Debemos volver a la «hora del sol», como antes de la Segunda Guerra Mundial. Esperamos y confiamos en que el próximo mes de marzo el Gobierno adopte el cambio, pero necesitará más medidas.

¿Como cuáles?

Por ejemplo, deberíamos recapacitar sobre la programación de las televisiones. Es demencial que el prime-time español se sitúe más allá de las diez de la noche. Coges la parrilla de las televisiones y todas cortan su emisión más tarde de las doce, algo que provoca el bajo rendimiento y el absentismo en el trabajo. Igual que el fútbol a las diez de la noche… En España dormimos 53 minutos menos que el resto de nuestros vecinos europeos y eso puede desembocar en casos incluso de fracaso escolar por la falta de descanso.

¿Cuentan con el respaldo de la sociedad?

Ahora mismo contamos con el apoyo de 138 instituciones representadas en la asociación, de cinco ministerios y hasta catorce comunidades autónomas.