El Gran Premio de Europa de Fórmula 1 es el paradigma de un modelo económico consistente en privatizar el negocio y socializar las pérdidas. Al menos eso se intentó. El Consell (a través de la Sociedad Proyectos Temáticos y del Circuit del Motor) quiso ayudar a que Valmor Sports tuviera beneficios. Le cedió los derechos de explotación del evento „los que no controlaba el patrón de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone„, después de haber pagado con dinero público el circuito urbano cuyo coste superó los 100 millones. La empresa privada fue constituida por Fernando Roig, Bancaja y Jorge Martínez Aspar. Valmor pagó el canon a Ecclestone el primer año. 19,4 millones. El segundo, la empresa lanzó un SOS al Consell y éste asumió la cuota anual de derechos del evento en el trazado urbano del remozado entorno portuario de Valencia. A rebufo de la Copa del América, querían que esta prueba convirtiera la ciudad en un segundo Mónaco.El expresidente Camps soñó que sería su gran evento. Viajó a Londres para cerrar el acuerdo «sin consenso» y, especialmente, antes de las elecciones. En plena campaña electoral, el presidente, la alcaldesa Rita Barberá y los empresarios de Valmor se citaron con él en el Palau de les Arts para firmar el acuerdo. No hubo rúbrica porque el magnate de la velocidad decidió, justo en el lugar de autos, aplazar hasta después de las elecciones el compromiso por si acaso las urnas hacían tambalear sus cálculos. El plante se contó en estas páginas un 11 de mayo. La oposición denunció entonces el uso partidista de un evento que iba a costearse con dinero público.
Camps había prometido que la prueba no costaría un euro público. Pero la Generalitat acabó enterrando unos 275 millones, entre la construcción del circuito, los años de canon pagados, las obras anuales de adecuación o la deuda que asumió al quedarse, a través del Circuit del Motor, con la quebrada Valmor por un euro. Un euro que llevaba «de regalo» la herencia de un pasivo de más de 30 millones. La quiebra de la Generalitat ha obligado a suspender ese evento sin acabar los 7 años de contrato inicial. El Consell celebra que Ecclestone ha perdonado la indemnización por incumplir el contrato. Se llevará los neumáticos y las vallas que eran de quita y pero acabaron formando parte del paisaje del Grau todo el año.
