El presidente Alberto Fabra avanzó en su Mensaje de Fin de Año la batalla en ciernes por la financiación autonómica pero, a diferencia de otros barones del PP, evitó el tono reivindicativo y cualquier posicionamiento de desmarque del Gobierno de Rajoy. En un discurso sin aristas que pudieran incomodar a Madrid, Fabra señaló que 2014 será "el año del nuevo modelo de financiación autonómica, mucho más justo con la C. Valenciana" y "centrado en las personas, no en los territorios". "Quiero dejar una cosa muy clara: no voy a consentir que se trate a la C. Valenciana de forma distinta al resto de España". Fue la única frase, reiterada desde hace meses como un mantra pero sin concreción alguna, en la que elevó el tono, aunque el destinatario ni siquiera tendría que ser el Gobierno sino que bien podría ser el resto de barones regionales.

Muy diferente fue el discurso del presidente madrileño, Ignacio González, quien aseveró que en 2014 no va a consentir que a sus ciudadanos "se les exijan más sacrificios, ni que se les pida que paguen más impuestos" por parte del Gobierno central, al tiempo que "exigirá" una nueva financiación, que "niega" 1.300 millones a Madrid. También el balear José Ramón Bauzá prometió trabajar "personalmente" para "recibir un trato más justo del Gobierno de Madrid", algo que defenderá "donde sea y ante quien sea". El extremeño José Antonio Monago aprovechó su mensaje para desmarcarse del Gobierno con la ley del aborto y defender que "nadie" puede "obligar" a nadie a ser madre. Una ley que días antes había criticado el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.

Al igual que otros presidentes regionales, Fabra aludió a la carrera independentista de Cataluña para recalcar que los valencianos "somos gente de diálogo que huye de planteamientos radicales y debates estériles que cuestionan nuestra identidad". "Porque ser valencianos es nuestra manera más leal de ser españoles", enfatizó, tras destacar que a los valencianos "nos une un sentimiento común: el de pertenencia a una Comunitat y a una nación, España".

El análisis del discurso, reflejado en un mapa con las palabras citadas al menos dos veces y de mayor tamaño en función de las menciones, evidencia que los términos más empleados fueron -sin contar las obvias como "año"- "Comunitat" (8), "Valenciana" (5) y España o "Espanya" en la parte del discurso en valenciano (7 en total), frente a "financiación", solo una. "Personas" o "empleo" se repitieron 3 veces. El jefe del Consell insistió en que afronta 2014, el "año de la recuperación", "con optimismo", tras acabar 2013 con casi 20.000 valencianos menos desempleados, "lo que supone el mayor descenso anual del paro en los últimos 13 años". Destacó que la subida de las exportaciones y el turismo, la creación de 30 empresas al día o la inversión extranjera abren "un escenario de esperanza" y ofrecen la "verdadera imagen" de la C. Valenciana, "muy distinta" de la que "algunos se empeñan en presentar". Los "sacrificios", dijo, "van a tener su recompensa".

En un discurso en el que no aludió al cierre de RTVV ni a la corrupción, ni anunció medidas nuevas, señaló que 2014 será "muy importante" por el inicio de las obras del corredor mediterráneo, el consenso del Tajo-Segura, la nueva financiación y la puesta en marcha de "un plan extraordinario de inversión en infraestructuras sanitarias, educativas, judiciales y de abastecimiento de agua". Un plan que anunció en el debate de política general de septiembre y que no tuvo concreción en los presupuestos de 2014.