El pleno del Consell aprobó ayer el cese de Manuel Escolano como secretario autonómico de Sanidad, con lo que el titular de este departamento, Manuel Llombart, uno de los valores en alza del Ejecutivo de Fabra, con quien guarda además una buena sintonía personal, remodela su equipo al nivel más alto. En sustitución de Escolano, el Consell nombró como número dos de Sanidad a Luis Ibáñez, quien deberá dejar su acta como diputado autonómico por la provincia de Valencia por incompatibilidad con su nuevo cargo. La marcha de Ibáñez en las Corts será cubierta por la exalcaldesa de Requena Emma Iranzo, al ser la siguiente en la candidatura del PP.

El vicepresidente José Císcar, quien informó de la decisión tras el pleno del Consell, agradeció a Escolano los «servicios prestados» y destacó que «ha hecho una gran labor en todos puestos en los que ha estado en la Administración», por lo que podrían reubicarlo «en cualquier momento» en otra área de la Generalitat ya que «es una persona muy válida y con muchísima experiencia». Según dijo, con este tipo de cambios el Consell busca «dar nuevo impulso a la acción de gobierno» o bien situar «perfiles diferentes», dando a entender que el motivo que ha pesado ha sido el primero. Escolano entró como alto cargo en Sanidad en 1999 mientras Ibáñez, médico de profesión, ha sido delegado del Consell en Valencia (1996-2001), director general de Interior (2001-2005), secretario autonómico de Interior y secretario autonómico de Gobernación (2007 a 2011).

El socialista Ignacio Subías criticó que los «constantes» cambios «confirman el fracaso de la política sanitaria» de Fabra. Recordó que Llombart entró en diciembre de 2012 y nombró a su equipo, pero «en los últimos dos meses ha destituido a dos directores generales y cambiado a múltiples gerentes y directores de áreas de salud».