Las obras para adaptar el corredor mediterráneo al ancho europeo han aliviado la caída en picado de las licitaciones en la Comunitat Valenciana, que habían sufrido un desplome del 90,46% entre 2007 y 2012, según el análisis de los concursos de obra pública que realiza la Cámara de Contratistas de la Comunitat Valenciana. La Conselleria de Infraestructuras, la inversora por tradición en la Comunitat Valenciana, sigue siendo el farolillo rojo de esta clasificación y en 2013 licitó la misma cantidad de concursos de obras que las universidades valencianas y la mitad que la Diputación de Valencia.

Según los datos de los contratistas, que después recopila la patronal del sector Seopan, en la Comunitat Valenciana se ha pasado de impulsar obras públicas, por parte de todas las administraciones, por valor de 4.978 millones de euros en 2007 a sólo 474,98 millones en 2012, un 90,46% menos. Un descenso vertiginoso que sólo ha conseguido frenar la puesta en marcha de las obras del Adif en el corredor mediterráneo que en la Comunitat Valenciana ascienden a 215,8 millones de obras licitadas durante 2013. Los contratistas también recuerdan que Adif también ha licitado y adjudicado a finales de 2013"un complementario de los accesos del AVE a Alicante-Fase II, que no estaba finalizado en su fecha de inauguración, por importe de 70,1 millones de euros".

Además de las actuaciones ferroviarias, las obras hidráulicas también han animado el sector de la obra pública con los 42 millones licitados por las empresas que dependen del Ministerio de Medio Ambiente, Acuamed (25 millones), Canales del Taibililla (11 millones) y Seiasa (6 millones) "todas ellas ligadas a las desaladoras, potabilizadoras y depuradoras necesarias para reutilizar las aguas terciarias o grises. Máxime cuando se han recibido Fondos Feder, por lo que hay que garantizar la inversión, que figuraba en los Presupuestos Generales del Estado de 2013".

Estas cantidades son las que han permitido cerrar el año 2013 con casi un 30% de licitaciones más en la Comunitat Valenciana que en 2012. Hasta noviembre, la obra pública se había incrementado un 24,05%, pero hay que sumar el concurso para la conservación de carreteras en Alicante y Valencia licitado por el Ministerio de Fomento el 31 de diciembre y que añadiría 33,7 millones más al cómputo definitivo de la obra pública en la Comunitat Valenciana en 2013.

La cruz del balance del pasado año la sigue protagonizando la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente que "sigue siendo el farolillo rojo y sigue cayendo". Y ello pese a que el departamento de Isabel Bonig también ha sacado a licitación en 2013 la conservación y mantenimiento de las carreteras autonómicas de la provincia de Valencia "por un importe conjunto de 28,167 millones de euros: tres lotes y cuatro años (2013-2017), lo que dará una cartera y producción de apenas 6 millones de euros por año y empresa entre las tres posibles adjudicatarias", señalan desde la Cámara de Contratistas.

Curiosamente, las tres universidades valencianas han sacado a concurso obras por el mismo valor que la Conselleria de Infraestructuras. "Las universidades figuran con 28 millones de euros de licitación" para impulsar actuaciones "importantes" como el "Edificio de Investigación del Campus de Paterna de la Universitat de València, la Facultad de Ciencias de la Salud (fase 1ª) de la Jaume I de Castelló y los laboratorios de investigación en ingeniería civil en la Universidad de Alicante".

El director-gerente de la Cámara de Contratistas, Manuel Miñes, concluye el análisis lamentando que "la Generalitat está licitando el 5,73% de lo que sacaba a concurso en 2007, hace apenas cinco años. Estas cifras certifican por sí solas el fin de un sector de la construcción de obra civil en la Comunitat Valenciana sin que produzca ningún tipo de rubor en los dirigentes de nuestra clase política".