El juez del caso Gürtel, José Ceres, ha abierto una nueva línea de investigación tras escuchar la declaración de un testigo que implicó a Cotino en la sonorización de la visita del Papa. El magistrado reveló ayer a las partes que los testigos ocultos que le llevaron a decretar el secreto de sumario son el ex jefe del departamento técnico de RTVV durante la transmisión, Lluís Sabater, y el ex director de producción de Orange Market Juan Carlos Rincón. Lluís Sabater explicó en un vídeo no emitido del programa Societat Anònima grabado durante la desmantelación del ente que el presidente de las Corts, Juan Cotino, fue quien tuvo la idea de instalar pantallas gigantes en Valencia. La trama dirigida por Francisco Correa facturó 7,5 millones de euros a RTVV por la sonorización de la visita del Papa.

El juez, según recoge el auto notificado ayer, decidió decretar el secreto parcial del sumario tras la comparencia voluntaria de Juan Carlos Rincón. El testigo acudió al TSJ el 25 de octubre y aportó 14 documentos. Fuentes cercanas al caso explicaron que Rincón también optó en 2006 al contrato de la sonorización de la visita del Papa cuando ya no estaba en Orange Market.

El testigo informó al magistrado de un presunto acercamiento previo por parte de Orange Market y de personas vinculadas a la firma de Correa y «a través de la Fundación V Encuentro y de RTVV». Hasta ahora la investigación se había centrado en la fase de contratación y ejecución del contrato de sonorización. Rincón ya vinculó en una declaración que hizo en septiembre a Cotino con las negociaciones del contrato.

Adjudicación de la vigilancia

Unos días después el 30 de octubre compareció de forma voluntaria en el TSJ Lluís Sabater. El ex directivo de RTVV que está imputado en esta pieza aseguró que quería colaborar con la Justicia «con la finalidad de que la verdad brille cuanto antes en este proceso». Sabater aportó abundante documentación sobre el proceso de adjudicación a Teconsa y a la adjudicación de la vigilancia en la visita de Benedicto XVI.

Lluís Sabater participó poco después en el vídeo de Societat Anònima, grabado durante la revolución de los trabajadores del ente tras anunciar el Consell el cierre de RTVV. Lluís Sabater señala en el vídeo que compró laSexta por 300 euros y que no ha emitido todavía por contener

declaraciones sobre las pesquisas que mantuvo una reunión con otros jefes de RTVV y Juan Cotino, en aquella época conseller de Agricultura aunque muy involucrado en la organización de la visita del papa Benedicto XVI a Valencia. En esa reunión, según fuentes conocedoras del contenido del vídeo, es donde el actual presidente de las Corts insiste en montar pantallas gigantes por toda la ciudad de Valencia. La otra idea de Juan Cotino, según fuentes conocedoras del caso, fue la instalación de 7.000 urinarios móviles.

Las declaraciones de Juan Carlos Rincón y de Lluís Sabater dieron lugar a la intervención de diferente documentación en la sede de RTVV y en la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias y 22 diligencias relativas al acceso de ficheros informáticos del ente público.

El magistrado del caso ha remitido toda la documentación a la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la policía para que elabore un informe. El juez José Ceres cierra el auto apuntando que ya no es necesario mantener el secreto parcial de las actuaciones para continuar con las pesquisas.