Los resultados de los análisis microbiológicos de las muestras que se tomaron al adolescente Manuel G. E, de 17 años, que murió en la UCI del hospital de Dénia a tan solo tres días de manifestar los primeros síntomas de una infección respiratoria (fiebre, malestar, congestión...) confirmaron que el agente causante de la patología que ocasionó la muerte a este joven vecino de Xàbia de forma fulminante fue el virus de la gripe A, el temido binomio de las dos proteínas virales H1N1, que hace cuatro años protagonizó un cruce de especie al saltar del cerdo al humano y desató la alarma mundial.
La familia del joven, destrozada por su pérdida, tardó más de diez días en acudir al centro de salud de Xàbia para recoger los resultados de las pruebas que podían arrojar algo de luz sobre las causas de la repentina muerte del muchacho, que a las siete de la tarde del martes 21 de enero acudía por su propio pie a la consulta del médico del ambulatorio por un agravamiento de los síntomas y cinco horas después agonizaba en la UCI, sin que nadie pudiera hacer nada por evitarlo.
Los médicos que atendieron al joven en el centro de salud ya adelantaron a Levante-EMV que la causa de su fallecimiento era la gripe A, si bien las sospechas de los facultativos necesitaban estar respaldadas con los resultados del Centro Nacional de Microbiología.
El certificado de defunción recogía que el muchacho, que comenzó a sentirse mal después de volver de jugar un partido de futbol un sábado lluvioso, había muerto de neumonía, que es una de las formas graves en las que puede cursar la gripe.
Aunque el número de casos de infección gripal este año ha sido considerablemente menor que los del año pasado —de 350 casos por 100.000 habitantes que fue el máximo pico en 2013 a algo más de 220 en la máxima prevalencia de este año-—, la letalidad del agente infeccioso ha sido mucho más intensa. De hecho, el número de fallecidos prácticamente se ha duplicado: de 18 a 30.
Los últimos datos que la Conselleria de Sanidad ha dado a conocer indican que durante la última semana la tasa ha caído a 40 casos por cien mil habitantes, lo que significa que en la semana octava del año (del 17 al 24 de febrero) dos mil personas desarrollaron un cuadro gripal, ocasionado mayoritariamente por el virus de la gripe A que afecta con especial agresividad a las embarazadas y a las personas obesas.
La epidemia de este año generó también 365 ingresos de pacientes graves en zonas de aislamiento y en las UCI.
Los datos registrados este año están más cerca de los que se contabilizaron en la temporada 2009-2010 de la alarma mundial, que los recogidos en los últimos dos ejercicios. Aquel año en el que el H1N1 se convirtió en la pesadilla de los equipos de Salud Pública del mundo, en la C. Valenciana se contabilizaron 46 fallecimientos y 552 casos graves.
Un dato que se mantiene estable temporada tras temporada es el porcentaje de personas que desarrollan la infección gripal pese a haberse vacunado, que es el 15 % del total de hospitalizados, mientras que el otro 85 % no estaba inmunizado contra la acción del virus.
