La ligera reducción del copago para discapacitados y dependientes que prometió la Conselleria de Bienestar Social se empezará a aplicar desde el próximo 1 de julio, según anunció ayer en las Corts el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra. Así, los usuarios de las residencias se podrán quedar de sus prestaciones para gastos personales 213,5 euros al mes y no 126 como en la actualidad, 2.562 euros al año. Los discapacitados en viviendas tuteladas y centros de día sólo copagarán a partir de 532 euros al mes.

Tras la aplicación del copago a los dependientes usuarios de residencias, centros de día y pisos tutelados el pasado 1 de enero el sector se movilizó fuertemente contra esta medida, que consideran injusta y desproporcionada ya que, en algunos casos, los usuarios de estos centros se quedaban prácticamente sin dinero para subsistir una vez descontada la aportación (copago) para el centro en el que están siendo atendidos. Las quejas del sector obligaron a la Conselleria de Bienestar Social a atender estas peticiones y en el mes de febrero presentó un documento donde reducía ligeramente la aplicación de esta medida.

Así, la Conselleria de Bienestar Social incrementará a partir del 1 de julio, dentro de 19 días, el conocido como «dinero de bolsillo» del que disponen los usuarios de residencias cuando les descuentan el copago. Desde el 1 de enero solamente les quedan 126 euros mensuales, mientras que el próximo mes el dinero disponible será de 213,5 euros, el 40 % del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples). En total, unos 2.562 euros anuales. Para las personas mayores en residencias públicas esta cantidad mínima pasará de 101 euros a 170. «Vamos a ser una de las Comunidades donde el dinero de bolsillo sea de los más altos de España», aseguró el presidente de la Generalitat.

Por su parte, las personas usuarias de centros ocupacionales o de día tendrán garantizado, según Alberto Fabra, que sus ingresos mensuales «nunca quedarán por debajo de los 532 euros». El jefe del Consell se comprometió ayer a que los abonos a la dependencia y la renta garantizada «serán prioritarios».

Bienestar Social también permitirá a partir del 1 de julio la compatibilidad de la prestación por desempleo con la figura del cuidador y la compatibilidad de la pensión no contributiva con la prestación por situación de dependencia. Para menores de 18 años se generaliza la prestación para personas en situación de dependencia por Cuidador No Profesional.

Los dependientes y discapacitados consideraron insuficientes estas medidas que se aplicarán en breve pero valoraron el cambio de actitud del Consell.