El juez del Tribunal Superior de Justicia, José Ceres, ha desimputado al alcalde de Castelló, Alfonso Bataller, de la causa Gürtel, que investiga posibles irregularidades en las contrataciones de la Generalitat con empresas de la trama, al no hallar indicios de delitos penales. Bataller recuperará la presidencia del PP local, que abandonó de forma provisional cuando fue incluido en el caso hace año y medio, y tiene vía libre para ser candidato a la alcaldía del PP en las municipales de 2015.

Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, el magistrado José Ceres además del sobreseimiento de Bataller ha decretado el de otros cinco imputados, entre los que se encuentra la ex secretaria autonómica de Deporte Niurka Montalvo. Entre los 27 procesados figuran el diputado autonómico del PP y ex secretario autonómico de Deporte David Serra, tres exconsellers y altos cargos de varias consellerias.

En una improvisada rueda de prensa junto a sus concejales, Bataller ha dicho estar "casi levitando" al conocer la noticia. Cabe recordar que Bataller fue imputado en abril del año pasado por el magistrado del TSJ por unos contratos fraccionados que realizó la Conselleria de Sanidad con Orange Market cuando era subsecretario autonómico en 2007 y 2008. El alcalde declaró en los tribunales dos veces, en junio de 2013 y en el mes de febrero, aseguró la legalidad de su actuación y vinculó las adjudicaciones a sus superiores en la conselleria -el exconseller de Sanidad, Luis Rosado. El juez le preguntó por cuatro contratos efectuados en los Premios de Salud y Sociedad de 2007, con un coste global de 30.000 euros, y sobre un vídeo promocional sobre la ampliación del Hospital Clínico de Valencia que fue elaborado en 2008 por Orange Market.

Ceres ha finalizado las diligencias de la conocida pieza 5 de Gürtel y retira la imputación a Bataller, quien ve garantizada la continuidad de su trayectoria política, que había visto amenazada de acuerdo con la doctrina de Alberto Fabra contra la corrupción, que excluirá cargos imputados en las candidaturas electorales de 2015. No obstante, Fabra había manifestado su apoyo a Bataller cuando se encontraba imputado y ya apuntaba que podría ser candidato aunque siguiera implicado. Para ello hacía un distingo y calificaba su causa como una circunstancia administrativa.