Nuevas Generaciones del PP ha optado por dar carpetazo a los expedientes abiertos hace meses contra cuatro dirigentes de las juventudes del PP de municipios valencianos como Xàtiva, Gandia o Canals que posaron con saludos fascistas o con simbología ultra y franquista. Las imágenes, desveladas por Levante-EMV el pasado verano generaron un gran polémica que obligó a intervenir a la dirección nacional de los jovenes populares. La organización decidió abrir formalmente una investigación, un proceso, que según fuentes de Nuevas Generaciones, conllevó la suspensión cautelar de militancia de los afectados.
Sin embargo, al final ha primado el perdón y, según confirmaron fuentes de la calle Génova, donde tiene su sede NNGG, se ha optado por cerrar el expediente sin aplicar sanción alguna a los afectados. Las mismas fuentes indicaron que los jóvenes afectados fueron entrevistados por el comité de derechos y garantías de NN GG para que explicaran los motivos de las imágenes. Los jóvenes, al parecer, se excusaron y alegaron, entre otras cosas, que bien no eran conscientes de los símbolos fascistas, bien que las fotografías databan de una época anterior a que estuvieran militando en el partido. Lo cierto es que el comité de derechos y garantías optó por no aplicarles sanción alguna. Y ello a pesar de que los estatutos del PP aprobados hace dos años y de los que el presidente valenciano Alberto Fabra fue ponente son contundentes a la hora de repudiar cualquier tipo de apología del fascismo. Aplicados con rigor desembocarían en la expulsión del PP o de sus juventudes políticas.
Así, el artículo 9 de los estatutos nacionales del PP, relativo a la pérdida de la condición de afiliado, recoge que la condición de afiliado al partido se extingue, entre otras causas, «por declaración o actitud de no acatamiento del orden constitucional o Estatuto de Autonomía», o «por manifestación pública de discrepancia grave con la ideología, principios o fines del partido, realizada en actos de propaganda, reuniones públicas o a través de cualquier medio de comunicación escrito o audiovisual o de cualquier medio de difusión que garantice la publicidad del hecho». Los mismos artículos se plasman en los estatutos de Nuevas Generaciones. Pero no sólo estas normas han quedado en papel mojado. Las polémicas imágenes „el goteo de casos llegó a preocupar a los dirigentes de la calle Génova„ acabaron provocando reacciones contundentes por parte de destacados miembros del PP. De hecho, lo que en principo fueron tímidas valoraciones desde el PPCV, incluidas algunas en las que se disculpaba la actuación , se transformó en condena sin paliativos. «Quien se fotografía con símbolos fascistas no merece estar en el PP», proclamó el vicesecretario de Estudios y Programas, Esteban González Pons, quien llegó a echar de un acto a un militante que había sido fotografiado junto a la bandera franquista.
La presidenta de Nuevas Generaciones, Beatriz Jurado, dio por hecho que las imágenes contravenían los estatus del partido. Aseguró que el comité de derechos y garantías resolverá este asunto «con los estatutos por delante y con la contundencia que desde un principio hemos mostrado». Sin embargo, sólo hubo contundencia respecto a uno de los militantes de la organización juvenil que en agosto colgó en su página de facebook una fotografía haciendo el saludo nazi con la bandera del PP de fondo. Jurado anunció su expulsión, pero el motivo no fue su actitud sino el hecho de que contaba con carnés de varios partidos, algo que el PP sí que no perdona.
