La Generalitat defendió ayer que los 4.354 millones que le fueron transferidos por el Ministerio de Hacienda a través del mecanismo extraordinario del plan de pago a proveedores se utilizaron para saldar facturas «cumpliendo estrictamente con los requisitos establecidos por el Gobierno central». El Consell recordó que ese fondo especial de emergencia se gastó de acuerdo con unas pautas que fueron fijadas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera y luego puestas en funcionamiento por el Gobierno de Rajoy en marzo de 2012. En esos acuerdos, recuerda el Consell de Alberto Fabra, se establecían los criterios «objetivos que debían reunir las obligaciones pendientes de pago» y «no es la Generalitat la que define quién puede acogerse» a ese plan. En ese sentido, la Conselleria de Hacienda subrayó ayer que todos los pagos que se efectuaron cumplían la normativa.

El departamento de Juan Carlos Moragues trasladó, además, que «cumpliendo estrictamente con esa regulación», se remitió al Ministerio de Hacienda «una relación certificada por la Intervención General de la Generalitat con todas aquellas obligaciones pendientes de pago de la Generalitat y a sus entidades dependientes que reunían los requisitos de carácter objetivo exigidos (...) de manera que los proveedores pudieran aceptar, en su caso, tras la pertinente consulta en la correspondiente plataforma informática habilitada para ello, el abono de su facturación pendiente a través de dicho mecanismo extraordinario de pagos».

Además de presumir de «transparencia» al recordar que la información de los pagos ha sido facilitada por el propio Consell 10.913 facturas a 1.168 proveedores, desde la conselleria de Juan Carlos Moragues insistieron en que en «ningún momento se ha abonado deuda financiera con plan de proveedores».

Achacaron los pagos a las diferentes entidades bancarias beneficiadas (Banco de Valencia, CAM, Bankia o Cajamadrid) al «abono de prestaciones de servicios realizados por diversas sociedades proveedoras, quienes, como acreedores, negociaron con las entidades financieras el anticipo de estas cantidades mediante productos como el factoring o endoso».