El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, alegró ayer el día a las decenas de miles de valencianos que preparan oposiciones para la sanidad y la enseñanza pública. Anunció un aumento de la tasa de reposición que desde 2012, dentro del paquete de medidas de «racionalización» del gasto público, limita la Oferta Pública de Empleo (OPE) al 10 % de las plazas de funcionarios que se jubilan.
El proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) aprobado ayer por el Consejo de Ministros para 2015, año de elecciones autonómicas en la C. Valenciana y en la mayoría de autonomías, eleva la tasa de reposición del personal del Estado encargado de servicios esenciales del 10 al 50 %. Esto supone que en los llamados servicios esenciales la educación, la sanidad, las fuerzas de seguridad y orden público y control y lucha contra el fraude fiscal se podrá reponer a uno de cada dos jubilados que jubilan en lugar de uno de cada 10. El resto de las plantillas de funcionarios siguen «congeladas».
Petición de la consellera Català
La propuesta de elevar la tasa de reposición al 50 % fue planteada por la consellera de Educación, María José Català, en mayo pasado durante una reunión sectorial de todos los consejeros autonómicos del ramo con el ministro José Ignacio Wert. Català, apoyada por el resto de consejeros, pidió al Gobierno que en los presupuestos de 2015 se suavizaran las medidas de austeridad para incluir en la OPE «un mínimo del 50 %» del profesorado que se jubila.
Fuentes de Educación anunciaron ayer que el aumento de la tasa de reposición permitirá sacar a oposición en 2015 «unas 600 plazas para los cuerpos de maestros y profesores» de la C. Valenciana. Cada año se jubilan de media unos 1.200 de los más de 50.000 docentes que tiene en plantilla la conselleria. A éstas 600 plazas hay que sumar otras 116 de la OPE de este año que se acumulaban para 2015 por un acuerdo con los sindicatos. En total las oposiciones podrían superar las 700 plazas, más del doble de las 300 de 2013 pero casi la mitad de las 1.250 de 2010. En 2011 sólo se convocaron 110 y cero en 2012.
Los rectores de las cinco universidades públicas valencianas han rechazado desde el primer día la tasa de reposición porque envejece la plantilla del profesorado, limita la autonomía universitaria e interrumpe la carrera docente. Uno de los más críticos es rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo, quien alerta de que esta barrera está dificultado enormemente el mantenimiento de la calidad de la docencia y la investigación. Aunque ante la falta de un redactado definitivo Morcillo apela «a la prudencia», considera que «cualquier tasa de reposición que sea superior al 10 % será bienvenida, aunque no será la solución al problema».
Por otro lado, el Sindicato Médico de la C. Valenciana califica de «electoralista y claramente insuficiente» el anuncio del Gobierno de elevar la tasa de reposición del personal sanitario en lugar de eliminarla por completo y alerta de que dejar de cubrir las vacantes tendrá «consecuencias graves para la salud de los valencianos».
