Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Medio Ambiente

La Generalitat suprimió las brigadas de plagas en plena explosión del Tomicus

La CGT habla de 150.000 pinos abatidos pero solo en la Rodana de Vilamarxant hay 60.000

Un informe oficial elaborado por la Dirección General del Medio Natural de la Conselleria de Territorio elaborado en los primeros meses de 2012 alertaba sobre la magnitud que había alcanzado la plaga de perforadores del pino, con un aumento de la superficie afectada, aunque la respuesta a esta emergencia anunciada fue el desmantelamiento de las tres brigadas que se encargaban del control de plagas.

En la actualidad, la plaga de perforadores del pino se encuentra absolutamente descontrolada y los intentos para sanear los montes supondrán la tala de al menos 150.000 pinos, aunque resulta difícil hacer una estimación, siquiera aproximada, de la mortalidad inducida por la plaga.

Según algunos informes, solo en la Rodana de Vilamarxant el número de árboles que deben ser talados supera los 60.000.

El último informe oficial disponible en el portal de internet de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente se elaboró en 2012 con datos de la prospección realizada a lo largo de 2011.

El informe reconocía a los insectos perforadores de la madera como «el mayor riesgo», para la salud de los montes de la Comunitat Valenciana y los identificaba como «la plaga que genera una mayor tasa de muertes en los pinares».

«Se han detectado perforadores en 71 masas más que la campaña anterior, lo que da lugar a un total de 462 masas en esta campaña (391 en 2010). Ello ha supuesto un incremento del 2,81% en el porcentaje de masas afectadas sobre el total de masas prospectadas. Actualmente es un 19,17% (16,36% en 2010; el 17,03% en 2009 y el 15,46% en 2008), lo que representa un aumento moderado», explicaba el informe.

Sanidad Forestal matizaba que aunque el número de masas afectadas se había incrementado a lo largo de 2011, el daño había sido menor. No obstante, tal como reconocen los técnicos de la conselleria, la clave para evitar los daños de los perforadores es mantener bajo control su población y ese control dejó de ejercerse en 2013 y en todo 2014.

Para evitar la expansión de esta y otras plagas, la conselleria implantó tres grupos de trabajo uno por provinciacon 13 trabajadores contratados por Vaersa cuya misión en el caso de los perforadores era colocar y mantener los «puntos cebo» en los eran capturados los insectos y descortezar los pinos infectados.

Las brigadas disponían de un presupuesto anual de 342.000 euros pero el 28 de febrero de 2013 fuero despedidos. Ahora, la conselleria pretende recuperar estos grupos de trabajo con una dotación de 200.000 euros, lo que provoca serias dudas sobre la efectividad de la medida entre los sindicatos UGT y CGT, así como en organizaciones com Acció Ecologista-Agró.

CGT aseguró ayer que la conselleria se ha limitado a colocar 130 trampas con atrayentes para todo el territorio valenciano, cuyo coste, aseguran no supera los 25 euros. «Ahora anuncian como algo extraordinario sesenta más, pero los expertos creen que harían falta al menos novecientas. Además, no nos consta que haya habido contrataciones de personal», dijeron fuentes sindicales.

Compartir el artículo

stats