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Empleo público

El Consell pacta en secreto devolver a los altos cargos parte de la extra que les quitó en 2012

El Ejecutivo abonó 55 millones a los funcionarios en enero tras una avalancha de sentencias y dos días después aprobó en un pleno beneficiarse de la medida aunque no divulgó el acuerdo - Los asesores también serán compensados en febrero

Los empleados públicos de la Generalitat recibieron en su nómina de enero alrededor de la cuarta parte de la paga extraordinaria de diciembre de 2012 (55 millones en total) que les fue detraída ilegalmente fruto de las medidas de ajuste del Ejecutivo de Mariano Rajoy. El abono fue consecuencia del acuerdo alcanzado semanas antes entre los sindicatos y el Consell tras dos años de batallas judiciales. El Ejecutivo de Fabra acabó cediendo, incluso en contra del criterio del Gobierno central, ante la cascada de sentencias en las que se condenaba a la Generalitat por haber descontado indebidamente la cantidad correspondiente a 44 días. El presidente, los consellers y el resto de altos cargos de la Generalitat y el sector público, así como los asesores, también se verán beneficiados por la devolución en su nómina de este mes sin necesidad de pelear tanto.

El pleno del Consell aprobó de tapadillo a finales de enero un acuerdo para beneficiarse con la devolución de un 24,04% de la cantidad detraída a finales de 2012. La medida, que avaló el Ejecutivo en su reunión del 30 de enero, es decir, dos días después de que los funcionarios vieran el dinero en sus nóminas, no se divulgó. Ese viernes, en la habitual rueda de prensa del Consell, la portavoz Maria José Català no dio cuenta del acuerdo que, a pesar de los días transcurridos, tampoco ha sido publicado en el Diario Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV). La discreción con la que Fabra y sus consellers han llevado un asunto que afecta directamente a sus bolsillos contrasta con la difusión que se dio al pacto con los sindicatos. El Consell lo presentó como una muestra de apoyo a sus empleados públicos y como una prueba de que los sacrificios habían terminado.

El Consell, como hizo en su día para aplicar el decreto estatal de la supresión de la paga extraordinaria de Navidad de 2012, ha utilizado dos vías diferentes para el recorte a empleados y altos cargos. De hecho, el real decreto estatal del 13 de junio de medidas urgentes para garantizar la estabilidad presupuestaria estaba pensado principalmente para los funcionarios, aunque contenía una previsión para los altos cargos. Al entrar en vigor, el Consell anunció como un gesto de solidaridad que también aplicaría el tijeretazo a los asesores, si bien se hizo el remolón respecto a sus altos cargos al alegar que existían dificultades jurídicas para extender el recorte a consellers y secretarios autonómicos porque carecían de paga navideña y que la tenían prorrateada. La presión mediática y de la oposición forzó la decisión y Fabra anunció que también los altos cargos verían recortado su salario para ser «solidarios» con los empleados públicos. La letra pequeña del decreto finalmente aprobado también generó su propia polémica, ya que tal como informó este diario en su día, el descuento se hizo de tal manera que el impacto para los altos cargos apenas representó el 2 % de su salario, mientras que para los funcionarios las reducciones llegaron incluso a representar 7 %. Por poner cifras al bocado de entonces, el presidente renunció a 1.200 euros y los consellers, 1.085 euros. Con el acuerdo, el primero deberá cobrar este mes unos 305 euros y sus colaboradores, 206 euros.

El Consell ha visto la oportunidad de recuperar para sí mismo y para su segundo escalón parte del dinero perdido y no se lo ha pensado dos veces, aunque ha preferido mantenerlo oculto. El acuerdo del 30 de enero, al que ha tenido acceso Levante-EMV, no se pierde en muchos argumentos para justificar los abonos y simplemente se aduce que después el acuerdo para devolver los 44 días a los funcionarios «es procedente y consecuente establecer y regular el abono» a los altos cargos, directivos del sector público y personal eventual.

El acuerdo, que lleva la firma del conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, también se apoya en una de las disposiciones de la ley de Presupuestos del Estado que regula la recuperación de la parte proporcional de los 44 días de la paga extraordinaria de diciembre. El Gobierno de Rajoy, a diferencia del Consell, nunca ha reconocido que una parte de la extra se detrajo ilegalmente, y ha presentado esta medida en sus presupuestos como una decisión propia. De ahí que los sindicatos quieren aprovechar esta formalidad para pedirle al Consell otra devolución por el mismo importe. La disposición estatal establece que su aplicación, también para los altos cargos, es opcional.

El Consell especifica que el abono afecta también a asesores, directivos y altos cargos que ya no trabajan en la Generalitat, pero que quedaron afectados en su día por el recorte solidario. Todos cobrarán antes de acabar febrero.

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