La transferencia con la extra casi íntegra de 2012 llegó entre el jueves de la semana pasada y este lunes a las cuentas corrientes de los diputados. Pero, por lo visto, alguno se la podría haber fundido ya, al menos en parte. Por eso las Corts, para las que lo importante es que la paga se retorne, van a dar facilidades de pago. Tanto, que sus señorías podrán reintegrar los fondos a la Tesorería del Parlamento en cómodos plazos. Hasta tres meses, entre marzo y mayo [el margen se acaba ahí porque el 24-M hay elecciones]. Lo dijo el presidente de la Cámara, Alejandro Font de Mora, en la reunión a puerta cerrada del martes en la que la Junta de Portavoces acordó que los parlamentarios devuelvan el dinero percibido para equiparse a los funcionarios de la Generalitat, que solo han recuperado el 25 % de la paga. Font de Mora puntualizó que esos fondos ya los han dispuesto los diputados en virtud de un acuerdo adoptado legalmente, con lo que, en el supuesto de que alguno tenga dificultades para retornarlos ya, la Cámara dará facilidades permitiendo el fraccionamiento.

De hecho, en la institución circula ya un modelo de formulario elaborado por los Servicios Económicos para los que opten por el reintegro a plazos. En la Cámara se prevé que la mayoría de diputados seguirá el procedimiento aprobado con carácter general, de forma que en la nómina de marzo, que percibirán a final de mes, se les descontará el «exceso», para que el ajuste les deje el 25 % de la extra (el equivalente a 44 días devengados). Cabe recordar que todos los grupos aprobaron recuperar la paga a la que renunciaron en 2012, equiparándose a los empleados de la Cámara. El problema es que como en las Corts la supresión de la extra no se publicó en 2012 hasta el 29 de noviembre, se devengaron 179 días, el 97 % de la extra. Al revelar Levante-EMV el cobro, los grupos han dado marcha atrás alegando que no sabían que al homologarse a los funcionarios de las Corts se adjudicaban la paga casi íntegra, frente al 25 % recuperado por los empleados del Consell.

En la reunión de la Junta de Portavoces, el síndic socialista, Antonio Torres, enfatizó que tenía que quedar claro que se renunciaba a la extra, y mostró su temor de que el fraccionamiento traslade la imagen de que los diputados se resisten a devolver el dinero o incluso de que se abra la vía para que alguno, excluido de las listas, no lo retorne. Como mínimo, algunos parlamentarios podrán financiarse con este dinero, a modo de adelanto. A interés cero, como el FLA. Con todo, hay señorías cuya situación ha cambiado respecto a 2012 (han renunciado al sueldo porque preparan la vuelta a su vida profesional). Así, con lo que perciben no les llega para descontarles los 2.400 euros. A esos el ajuste se les hará en varios meses, aunque no se entiende por qué simplemente no lo devuelven ya.

Tres formularios para pagar

El caso es que, ahora mismo, hay tres formularios para que los representantes reintegren el dinero: el general, que comportará que a final de mes se les hará el ajuste en la nómina de marzo; el del pago fraccionado, por si alguien lo solicita, entre marzo y mayo; y el confeccionado para el sistema adoptado por el síndic del PSPV, consistente en devolver todo lo cobrado y que, una vez las Corts decidan qué hacer, se les abone lo que corresponda. Esta vía tiene el inconveniente de que fiscalmente se trata de donaciones de diputados al Parlamento y el procedimiento para regularizarlo resulta engorroso. Hasta ayer, 14 de los 33 diputados socialistas habían seguido esta vía, que en privado cuestionan muchos diputados del PSPV. No obstante, el plazo para renunciar a la paga concluye el 15 de marzo. El síndic, Antonio Torres, llamó ayer a varios para pedirles que siguieran su vía.

En el PP se tienen pocas esperanzas respecto a la quincena de diputados que dejó la Cámara por casos de corrupción y a los que se abonó la extra. Dan por seguro que la mayoría no la retornará.