Les Corts Valencianes han rechazado hoy, con los votos en contra del PP y a favor de la oposición, la creación de una comisión de investigación sobre bebés robados y adopciones irregulares en la Comunitat Valenciana entre los años 1940 y 1990.

La iniciativa, presentada y defendida por el PSPV en el último pleno de la legislatura, proponía la creación de esta comisión en el plazo máximo de una semana y la conclusión de sus trabajos antes de la finalización de la presente legislatura, algo que se producirá la próxima semana con la disolución de la Cámara.

La socialista Modesta Salazar, quien ha pedido un voto favorable "a la verdad, la justicia y la reparación" de las víctimas, ha destacado que el robo de bebés, de los que en la Comunitat podría haber 3.000 casos, se produjo "en clínicas públicas y privadas, orfanatos, casas cuna y casas de acogida de mujeres".

Salazar ha defendido el derecho de estas personas a acceder a los archivos hospitalarios, de cementerios y eclesiásticos, y tras denunciar que "el franquismo sigue aquí", ha advertido: "No ayudar a las víctimas nos convierte en cómplices de una realidad con memoria", pues el dolor es "actual y cotidiano".

La diputada del PP María José García, quien ha calificado la iniciativa "demagoga, inapropiada, extemporánea y oportunista", ha recriminado a los socialistas que presenten la propuesta cuando quedan cuatro días para la disolución de Les Corts, y ha criticado el período que pretenden investigar.

"¿Qué administración y qué gobiernos deben ser controlados e investigados? ¿A quién hay que exigir responsabilidades?", ha preguntado García Herrero, quien ha recordado que la mayor parte de estos casos ocurrió en una época en que la adopción era un acto jurídico privado dependiente de la voluntad de las partes, en el que las Administraciones no tenían competencias.

Asimismo, ha preguntado por qué no se investigaron estos casos durante los años en que gobernó el PSOE, y ha considerado que la postura "más ajustada a derecho" es dejar trabajar a la justicia, con la que el Consell, ha precisado, tiene una "total colaboración".

Salazar ha reprochado que el Gobierno valenciano tardara un año en crear una comisión interdepartamental de apoyo a las víctimas, y ha denunciado que no existe "ninguna voluntad" por esclarecer estos casos, y que tanto "el nacionalcatolicismo" como "el machismo" siguen sentados en muchos de los escaños que ocupa el PP.

La diputada popular ha defendido que el Consell colabora desde hace más de dos años con las asociaciones de víctimas y con los juzgados que conocen estas causas, y ha acusado a la diputada socialista de que su único interés sea "intenta levantar sospechas" hacia este partido.

Mónica Oltra (Compromís) ha acusado al PP de no querer destapar esta trama para proteger "determinadas estructuras que no son dignas de llamarse Iglesia Católica y apellidos ilustres", mientras que Esther López (EU) ha asegurado que el próximo gobierno progresista contribuirá a garantizar que esclarezcan estos casos.

El debate ha sido seguido por varias representantes de asociaciones de bebés robados, entre ellas Prace Maxia, quien en 2013 estuvo encadenada ante el Palau de la Generalitat para reclamar la exhumación de los supuestos restos mortales de su hija, fallecida a las pocas horas de nacer en 1982 en el hospital Doctor Peset de Valencia.

En declaraciones a los periodistas tras el debate, Maxia ha acusado a los diputados del PP de "no tener corazón" y de "reirse de las madres" que sufren, en su caso, desde hace 32 años, y ha agradecido a los grupos de la oposición el apoyo que les han ofrecido.

Sobre las investigaciones, ha dicho que poco a poco consiguen cosas, a pesar de que les cierran todas las puertas, y ha explicado que ha podido acceder al microfilme de la historia de su parto, en el que se asegura que su hija vivió doce horas, cuando siempre le habían dicho que eran entre ocho y diez.

Ha señalado que en él consta también el nombre y apellidos del bebé: Jesica Medina Maxia, algo que, según ha dicho, no debería aparecer con ese tiempo de vida, al tiempo que ha destacado que en otra parte de los informes consta que es un niño.

Maxia ha exigido una explicación por estos hechos y ha advertido de que luchará por encontrar a su hija mientras le quede "un hilo de vida".