La exconsellera de Turismo Lola Johnson aportó al Consell la documentación sobre la compra de la gestora privada de la Fórmula 1„en la que se detallaba la asunción y condonación de deudas de la firma por 45 millones„ 18 días después del pleno del Ejecutivo valenciano del 9 de diciembre de 2011 en el que se tomó la decisión de adquirir la firma por un euro, pero más de dos meses antes de que se hiciera efectiva esa adquisición, en virtud del acuerdo de la sociedad pública Circuit del Motor (presidida por Johnson) del 28 de febrero de 2012 y la consiguiente firma del contrato de compraventa también por parte del Circuit, el 7 de marzo de 2012. De este modo, los actuales responsables del Ejecutivo eran sabedores de la repercusión para las arcas públicas de la operación y podían haberla frenado. Algo que no ocurrió.
La ruinosa operación de compra de Valmor „la firma que explotaba los derechos de la F1, integrada por Fernando Roig, Bancaja, el expiloto Jorge Martínez Aspar y Vicente Cotino„ fue denunciada por EU a la Fiscalía que, tras unas pesquisas, presentó una querella contra el expresidente Camps, Johnson y Aspar por prevaricación, malversación y delito societario. El 3 de febrero, el TSJ admitió la querella y aceptó investigar el caso, situando a Camps al borde de la imputación. Ayer, la Ser-Valencia reveló que, en sus respectivas declaraciones como testigos ante el fiscal, tanto el actual vicepresidente del Consell, José Císcar, como su predecesora y delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, mantuvieron que «fue la consellera Johnson la que planteó la aprobación de la compra de Valmor por parte de Circuito del Motor», así como que «fue un punto que se introdujo por la vía de urgencia y que no dispusieron de ninguna documentación». Añadieron que «en ningún momento se habló de la condonación ni de la asunción de deudas de Valmor».
Según la Ser, la documentación que de forma oral aseguró Lola Johnson avalaba la compra de Valmor para no tener que pagar la penalización a Ecclestone y que provocó que el pleno del Consell, con Alberto Fabra a la cabeza, habilitara la adquisición no llegó a manos del Consell hasta 18 días después de esa reunión del Ejecutivo. Esa información, según la Ser, nunca formó parte del orden del día del pleno del Consell del 9 de diciembre de 2011 y llegó el 27 de diciembre de ese año, como hizo constar en su declaración el vicepresident Císcar. Este es el relato asumido por el fiscal para acusar a Johnson de engañar al resto de miembros del Consell al ocultarles que cuando compraban por un euro Valmor asumían préstamos por 31 millones y condonaban deudas por 14.
A expensa de los datos y auditoría
Sin embargo, varias fuentes conocedoras del caso advirtieron ayer que lo que decidió realmente el Consell, constituido en junta general de accionistas de Circuit de Motor, en aquel pleno del 9 de diciembre de 2011 fue «el inicio del procedimiento para la compra» de Valmor, mandatando, de hecho, a recabar toda la información e incluso a encargar una auditoría sobre la situación de la firma que iba a adquirirse. «Al instar a recabar la información y una auditoría se daba por supuesto que no se tenían todos los datos, ya que no teníamos por qué creernos la información contable que facilitaba Valmor», explicaron las mismas fuentes.
Y ello al margen de que, según fuentes de los querellados, tanto el presidente Alberto Fabra como Sánchez de León, primero, y a partir del 2 de enero de 2012, Císcar, cuando fue designado vicepresidente, «eran conocedores de las decisiones». Y es que, subrayaron las mismas fuentes, Sánchez de León y Císcar (quien tomó las riendas a partir de enero de 2012), «participaron en las negociaciones». De este modo, recalcaron que hubo tiempo más que de sobra para parar una decisión que no culminó hasta el 7 de marzo de aquel año. Agregaron que la compra no se frenó porque el Ejecutivo de Fabra valoró que, si no se adquiría Valmor, no habría F1 y se tendría que abonar a Ecclestone una penalización de 71 millones. En una entrevista a la Ser en enero, Fabra dio a entender que estaba al corriente y aseveró que Johnson «hizo lo que tenía que hacer».
EU: «Fabra y Johnson engañaron»
Ayer, Ignacio Blanco (EU) censuró que tanto Fabra como Johnson «engañaron» y son «los verdaderos responsables de una decisión que supuso una ruina para los valencianos, impuesta por unos amigos del PP que pretendieron salir indemnes de una operación gestada por la megalomanía de Camps».
