La Diputación de Valencia ha negociado con la Unidad Militar de Emergencias (UME) la posibilidad de establecer un servicio de transporte en una barcaza militar de cables atirantados por el embalse de Cortes de Pallás para permitir el acceso de camiones y camionetas de abastecimiento, sin tener que dar el gran rodeo por las pistas forestales del macizo de Cortes de Pallás. Los mandos de la UME aseguraron a los técnicos del área de Carreteras de la Diputación de Valencia que no habría ningún problema en suministrar una dotación de este tipo. De hecho, la UME realiza este tipo de intervenciones en estos momentos en otros puntos de España en casos de emergencia, previa autorización de la Delegación del Gobierno.

Para hoy hay convocada una reunión entre el alcalde de Cortes de Pallás, Alberto Sáez, y técnicos de la Diputación para conocer «in situ» el terreno y las posibilidades que ofrece, aunque esta solución que se plantea implica la autorización de la Delegación del Gobierno y la Confederación Hidrográfica del Júcar. Como titular de la CV-428 que ha está cortada por la caída de la ladera, la Diputación de Valencia ha buscado vías alternativas para la comunicación terrestre por las pistas forestales que conectan el municipio afectado con Miralles y Jarafuel. Sin embargo, el trayecto por las pistas forestales es largo y ofrece mayor penosidad para el transporte rodado que la carretera tradicional, motivo por el que se busca una conexión a través del embalse. Aunque se planteó montar un puente flotante del Ejército entre las dos orillas del pantano, está opción se descartó porque la distancia que cubren (150 metros) es mucho más pequeña de la distancia real a cubrir en el pantano de Cortes (unos 400 metros).