Varios de los periodistas que se vieron afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de RTVV han acabado trabajando en Presidencia de la Generalitat. El caso más significativo es el actual secretario autonómico de Comunicación José Luis Torró, quien fue presentador de varios programas y miembro del comité de empresa del ente. También Paula Meseguer era empleada del ente público cuando fue llamada por Alberto Fabra para cometidos políticos en su llegada al Palau.
La actual directora general de Comunicación, Maite Fernández, proviene de la televisión pública donde tuvo varios cargos de responsabilidad. En su equipo están periodistas como Clara Estellés o Alicia Ors, quienes también realizaron tareas informativas en la televisión en vías de liquidación. Lola Johnson, quien fuera directora de la televisión valenciana, dejó el ente para ser consellera en el Gobierno de Francisco Camps.
El camino inverso lo tomaron periodistas que tuvieron cargos de responsabilidad en Presidencia de la Generalitat y acabaron dirigiendo el ente público. Un paso más controvertido que el anterior. Genoveva Reig fue jefa de prensa de Eduardo Zaplana en Benidorm y después directora general de medios de comunicación en su Consell para acabar siendo directora general de televisión valenciana. El mismo camino que realizó Jesús Sánchez Carrascosa, jefe de gabinete de Zaplana y posteriormente máximo dirigente de Canal 9 cuando Jose Vicente Villaescusa fue el máximo responsable. Villaescusa había sido diputado del PP durante varias horas.
De Presidencia a la radio
Pedro García fue director general de relaciones informativas con Francisco Camps y acabó siendo director general del ente público. Nuria Romeral, quien también llevara la gestión de los medios de comunicación del Gobierno de Camps, acabó como directora de Ràdio 9.
Otros periodistas de Canal 9 y Ràdio 9 acabaron en puestos de comunicación en diferentes conselleries y empresas públicas.
